Fui el presidente fundador de la peña deportivista Viveiro, que había nacido el 14 de octubre de 1994 y lo he sido durante 30 años. Cuando cumplo las tres décadas hay un grupo interesante de chicos y chicas jóvenes que quieren dar el paso. Soy de los que piensa que no es bueno que alguien se perpetue en el cargo y al final es importante amoldarse a los tiempos, evolucionar y darse cuenta de que los chavales tienen otra visión de las cosas. Además, el club ha cambiado.
Es una directiva joven, lleva unos meses y les estamos dando todo el apoyo necesario para que la peña siga perdurando. Uno de nuestros éxitos es que esta peña ha tenido siempre mucha actividad durante todos estos años y ahora hay un grupo de chavales al frente.
Recuerdo perfectamente el día que la constituimos en el año 94. Nos reunimos en un salón en Viveiro, en el edificio sindical, 50 simpatizantes del Deportivo e invitamos a toda la gente que se sintiese deportivista a asistir para fundar la peña deportivista. Reunidas ese medio centenar de personas firmamos el acta de constitución.
Muchos de ellos ya no están con nosotros, desgraciadamente, pero procuramos siempre tener un recuerdo para ellos. De los fundadores debemos de quedar seis. Posteriormente, se hizo un acto en el restaurante Serra, que ya no existe y que se dedicaba a bodas y banquetes. En él nos reunimos los 50 fundadores y todos los que quisieron asistir y por parte del club estuvo Pachi Dopico, que era el que se encargaba de las peñas. Nos agasajó con varios regalos y nos deseó que tuviésemos un largo recorrido. La verdad es que creo que hemos sido muy obedientes.
Durante estos 30 años casi siempre hemos mantenido un número de socios que ha oscilado entre 100 y 120, pero nunca hemos bajado de la centena. Funcionamos con una cuota anual establecida en cada asamblea, además de ingresos extra, como la lotería.
Somos además una peña muy viajera y siempre viajan alrededor del 50% de los socios. Como peña hemos estado en todas las comunidades autónomas, además de las islas. Pero nuestra idea de viajes siempre ha sido el compaginar el fútbol con la parte más lúdica y cultural. Viajábamos a una zona determinada y hacíamos actividades complementarias a la asistencia al fútbol. Y la gente estaba conectada con esa idea de viaje.
Recuerdo cuando viajamos a Aalborg, justo el año de la fundación de la peña, aún no estábamos registrados pero nos dejaron unas entradas en un hotel en Santa Cruz. Y ahí nos fuimos desde Viveiro, pasando por Santa Cruz, a recogerlas y a tomar unos vinos antes de viajar a Dinamarca.
A pesar de la distancia que nos separa de A Coruña decidimos tener presencia en una zona de Riazor. Esta empezó siendo en el año 94 Preferencia Superior. Posteriormente nos pasamos a una ubicación que había antes de la remodelación, que era Preferencia Superior cubierta. Tenemos muy buenos recuerdos de aquella época, de las noches de Champions y de Europa. Recuerdo que teníamos un pasillo ancho y las celebraciones eran fantásticas. Una vez nos llevamos allí hasta unos centollos.
La peña cada año entrega un galardón “El deportivista del año” que elegimos tras una votación que realizamos en la asamblea anual. Se le hace entrega al ganador de un obsequio creado específicamente para este acto. La primera persona a la que se lo concedimos fue al expresidente Lendoiro, una persona muy querida y valorada. A partir de ahí han pasado jugadores, como Mauro Silva, Donato, Fran Colotto... Curiosamente un año empataron en este galardón a puntos Juan Domínguez y Fabrio y se lo entregamos a los dos.
El año pasado lo ganó Lucas Pérez y la nueva junta directiva entrante ha decidido este año homenajearnos a nosotros, a la antigua directiva. Es una gran satisfacción para mí que 30 años como presidente y con esa junta directiva se vean reconocidos. Somos una peña incansable, fructífera y que vive el deportivismo a tope.