Yeremay y David Mella, un verano de dos velocidades
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Yeremay y David Mella, un verano de dos velocidades

El canario, más rápido que nunca, protagonizó los mejores momentos de la pretemporada. El teense aún no se ha acercado a su nivel real tras la lesión
Yeremay y David Mella, un verano de dos velocidades
David Mella y Yeremay sacan un córner en corto durante el partido del LXXX Trofeo Teresa Herrera frente al Le Havre | quintana

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Yeremay y Mella. Mella y Yeremay. Las dos perlas de la generación de Marbella, del Juvenil blanquiazul campeón de España, han completado una pretemporada muy diferente por distintos motivos. Yeremay ha vuelto a demostrar su capacidad para desnivelar partidos. Y no solo eso. Se le ha vuelto a ver fibroso y explosivo. Más veloz que nunca. Su capacidad de desborde es determinante en un campeonato tan peleado y de contacto como la segunda categoría española.

 

 Tanto en el Riverside Stadium como en Riazor, sacó todo lo mejor de su repertorio. Ante el Middlesbrough se sacó de la chistera el mejor gol de los 13 que el Deportivo anotó en los 6 encuentros de pretemporada. Recibió de Luismi Cruz dentro del área, escorado hacia la izquierda, recortó hacia dentro y con la derecha la colocó en la escuadra opuesta de la portería de Sol Brynn. El sábado, en el Teresa Herrera, liquidó la conquista del vigésimo sexto decano del fútbol veraniego con un gol pleno de sangre fría, en una definición mano a mano con Mory Diaw marca de la casa.


El canario fue el delantero que más minutos estuvo en el césped en los seis encuentros de pretemporada, un total de 335. Eso sí, cuatro compañeros —el portero Germán, los defensas Dani Barcia y Samu y el centrocampista Diego Villares— superaron el minutaje del extremo blanquiazul. Yeremay firmó otro gol además de los dos mencionados, el que cerró el partido en el estadio de O Couto frente al Ourense CF, después de un gran control a un cambio de orientación de Charlie Patiño. Solo Eddahchouri, con 5 dianas, ha visto más puerta que él en esta pretemporada.

 

 

 

 


Si Yeremay ha dado muestras de que, al menos, sigue al nivel de la pasada temporada, quien parece haber dado un paso atrás es David Mella. En favor del teense hay que decir, sin embargo, que viene de sufrir una importante lesión en el bíceps femoral. Desde el 20 de abril, hace casi cuatro meses, no disputa un partido oficial. La lesión le hizo perderse los 6 últimos de la pasada Liga. Los problemas físicos se cebaron con el canterano desde su salto al plantel profesional y, en especial, durante el pasado curso. La disputa del Campeonato de Europa sub-19 con la selección española en el verano de 2024 tuvo buena parte de culpa. Mella apenas disfrutó de descanso entre la conclusión de la temporada del ascenso a Segunda y el inicio del curso de regreso a la división de plata. El torneo continental se celebró durante la segunda quincena de julio. Además, España lo disputó hasta el final, ya que se proclamó campeona.


Otro torneo internacional con España asoma en el horizonte para Mella. Precisamente el título continental del pasado verano dio al combinado nacional la clasificación para el Mundial sub-20. El torneo se celebrará en Chile del 27 de septiembre al 19 de octubre. Previsiblemente, Mella estará entre los 21 convocados por el seleccionador, el exjugador deportivista Paco Gallardo. Como mínimo disputará tres encuentros, el 28 de septiembre ante Marruecos, el 1 de octubre frente a México y el día 4 contra Brasil. Entre la concentración y los tres partidos de la fase de grupos, Mella se perdería, como mínimo, las jornadas 6, 7 y 8, frente a Huesca, Eibar y Almería. En caso de que España llegue a la final, serían dos encuentros más, los correspondientes a las jornadas 9 (Málaga) y 10 (Racing).


Mella ha participado en cinco de los seis choques de preparación —no jugó en Middlesbrough—, en los que ha sumado 211 minutos, 5 menos que Herrera y 99 menos que Luismi Cruz. Solo ante el Ourense CF disputó más de una mitad —62 minutos en O Couto— y no aportó ni goles ni asistencias. Su error a puerta vacía ante el Le Havre, precisamente tras una gran acción y servicio de Yeremay, sintetizó su flojo momento que, seguro, es pasajero por las circunstancias.

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