El Deportivo 2025-2026 comenzará su pretemporada el próximo 7 de julio y se presenta una campaña ilusionante en Segunda División con la confirmación de Yeremay como uno de sus buques insignia del equipo el curso venidero.

No obstante, es importante hacer balance del que ha finalizado (a la espera de que se decida el playoff de ascenso) y tomar nota de en qué aspectos tiene que mejorar el Dépor, que la temporada próxima dirigirá Antonio Hidalgo.

Riazor se merece más victorias.

El estadio herculino solo pudo celebrar seis triunfos este año. Uno con Imanol Idiakez (contra el Racing de Ferrol) y los cinco restantes bajo la dirección de Óscar Gilsanz (Eibar, Castellón, Almería, Cádiz y Albacete). La asistencia media al feudo blanquiazul fue de 21.678 espectadores, un dato inferior al de la campaña anterior, donde la afición deportivista, en Primera Federación, firmó una cifra insólita para la categoría: 23.020 espectadores por encuentro.

Aligerar una plantilla que ahora pesa.

El Dépor cuenta actualmente con 30 jugadores con contrato en vigor. No todos van a continuar y es ahí donde irrumpe en escena la destreza de Fernando Soriano para ser capaz de dar forma al nuevo proyecto. Un juego, el del mercado, en el que siempre hay direcciones, entradas y salidas y siempre moviéndose dentro de los márgenes que permita el límite salarial.

Un reparto más equitativo de los minutos.

La gasolina llegó justa para algunos jugadores en el tramo final del curso. Eso se tradujo en lesiones o apariciones más espaciadas. La diferencia entre los futbolistas habituales en el once, muchos de ellos con registros superiores a los 3.000 minutos, era notoria con respecto a la segunda unidad.
Futbolistas con presencia testimonial y que cuando tuvieron que competir adolecieron de los problemas derivados de la falta de ritmo de competición. Tener al mayor número de futbolistas enchufados, entre los debes del nuevo Dépor.

Construir un equipo en torno a Yeremay.

El futbolista canario acaba de renovar su vinculación con el Dépor y en su segundo año en la categoría de Plata será uno de los referentes del equipo. La exigencia del mercado sube con su continuidad, así como el reto de rodearlo de jugadores para que el Dépor sea más competitivo.

Acertar en las posiciones clave a reforzar. 

Soriano desveló que hay ciertas demarcaciones en las que el club está en la búsqueda de nuevos activos. La posición de centrales es una de ellas, con Pablo Vázquez con opciones de salir y Dani Barcia como único fijo. Un delantero es otra de las piezas que el Dépor está sondeando en el mercado. Soriano, no obstante, matizó que todas las operaciones van en consonancia con Hidalgo.

Jerarquía dentro del vestuario blanquiazul. 

La salida de Lucas Pérez supuso una pérdida no solo a nivel futbolístico si no también de liderazgo de la caseta. Con la marcha ya confirmada de otros capitanes como Jaime Sánchez o Pablo Martínez dicen adiós pesos pesados dentro del vestuario. 
Quedan aún futbolistas que pueden asumir ese rol como José Ángel y será importante que haya referentes para los más jóvenes.

La importancia de resolver el puzle de los cedidos. 

Diez jugadores estuvieron en préstamo este curso y toca decidir qué se hace en cada caso. Hay algunos que cumplieron en sus equipos, como Luis Chacón en la Cultural, y que llaman a la puerta del Dépor. Sobre otros hay más dudas, como Raúl Alcaina o Davo.

 La definitiva apuesta por la cantera. 

Se han dado pasos en estos últimos años, con la irrupción de Yeremay, Mella o Barcia. Diego Gómez se ha estrenado, aunque aún tiene que seguir aclimatándose a la liga. Tuvo sus apariciones Kevin Sánchez, que ya había debutado con el primer equipo. 

Además, este año gozó de su oportunidad Adrián Guerrero, jugador en edad juvenil, pero que compite con el Fabril. Dar minutos, respetar los tiempos de los jugadores en formación y tener paciencia, claves este curso.

Capacidad de adaptación a las circunstancias. 

El nuevo técnico de los blanquiazules, ha destacado durante su carrera por ser capaz de adaptar el juego a las plantillas que tenía. Además exjugadores que han estado a sus órdenes remarcan su destreza a la hora de ser capaz de leer los partidos e irse amoldando. Una capacidad de ajustarse a las circunstancias que es crucial en Segunda.

Resolver casos como el de Charlie Patiño. 

Llegó como uno de los fichajes más ilusionantes y promesa del Arsenal pero en su primer curso en el Dépor apenas ha gozado de protagonismo. Necesitado de un periodo de aclimatación, el mediocentro inglés dejó muestras en el campo de lo que puede ofrecer pero habrá que ver si convence a Hidalgo.