Genreau, Patiño y Mfulu, tres cuentas pendientes para una vacante
lll
17º-23º

Genreau, Patiño y Mfulu, tres cuentas pendientes para una vacante

Genreau, Patiño y Mfulu, tres cuentas pendientes para una vacante
Charlie Patiño y José Ángel, en un entrenamiento del Deportivo

Usuario

Con la salvación matemática en el bolsillo y el playoff como una utopía que probablemente acabe por desvanecerse este fin de semana, el Deportivo afronta las últimas cuatro jornadas de la Liga regular con el objetivo de terminar la temporada con buenas sensaciones y poner la primera piedra para la 2025-26. Eso en lo que respecta al colectivo, porque las circunstancias están preparando en las últimas semanas, y seguramente prepararán en las siguientes, escenarios para que futbolistas que a lo largo del año no han tenido el papel esperado se rediman o, al menos, levanten la mano mirando, también, al próximo curso.

 

Entre esos jugadores con cuentas pendientes están tres de los mediocentros de la primera plantilla que hasta el momento, en mayor o menor medida, han pasado de puntillas por la campaña de regreso del Deportivo al fútbol profesional. Cada uno con sus particularidades y desde luego destinados a diferentes roles, Mfulu, Charlie Patiño y Denis Genreau deben aprovechar estos cuatro partidos para demostrar que el club no tendrá que priorizar el mercado de pivotes el próximo verano.

 

La más que probable ausencia de José Ángel de aquí a final de Liga para recuperarse de sus problemas en el pubis ha abierto la ventana para que los tres den un paso al frente y empiecen a saldar sus deudas pendientes, teniendo en cuenta además que todos ellos tienen contrato para, al menos, la temporada que viene.

 

Mfulu, el que más se juega

El centrocampista congoleño será el jugador que se examinará más a fondo desde ahora a principios de junio. Una auténtica reválida para un futbolista que llegaba de Primera División y que, salvo momentos puntuales, ha dejado un rendimiento muy lejos de lo esperado. No le han ayudado sus problemas físicos, tanto los de esta temporada como los heredados de su último año en Las Palmas, en los que apenas pudo participar después de diferentes lesiones musculares.

 

Nuke es además el sustituto natural de José Ángel. Su par en lo que se refiere a perfil de mediocentro más posicional que debe anclar la sala de máquinas y dar equilibrio al equipo. A su favor tiene que se ajusta a lo que Óscar Gilsanz pide a todos sus mediocentros, pero sus últimas apariciones han sido preocupantes y durante su primer año como blanquiazul ha dejado la sensación de que necesita muchos minutos para ponerse a tono.

 

Su contrato se va, en principio, hasta 2026, aunque no hay que descartar que el acuerdo firmado el pasado verano guarde alguna sorpresa como la recién revelada por Cristian Herrera. Es el que más ha participado de los tres, sumando 24 partidos y superando los 1.000 minutos, pero desde su última lesión el 29 de enero en Tenerife solo ha aparecido en siete partidos, uno como titular, y no alcanza los 150 minutos.

 

Charlie Patiño, el deseado

En el caso de Charlie Patiño, la deuda debe ser compartida entre el propio jugador y el club blanquiazul, que cargó sobre sus hombros el pasado verano la presión de ser uno de los grandes fichajes para la temporada. Al mediocentro británico le pesaron mucho las expectativas, lo que unido a un complejo periodo de adaptación terminó por apartarlo por completo de la rotación. Ante el Albacete elevó su cuenta de participación a unos escasos 73 minutos, que se va hasta los 160 si contamos su titularidad en la Copa del Rey ante el Ourense CF, donde no mejoró las sensaciones.

 

A su favor juega el cariño y las esperanzas que, además de la dirección deportiva, tiene en él todo el deportivismo. La afición blanquiazul lo pidió el pasado domingo en Riazor y lo aclamó en cada intervención cuando salió al césped. No parece que esta dinámica vaya a cambiar, por lo que el balón está en su tejado ahora.

 

 

 

Tanto sus compañeros como el cuerpo técnico están encantados con su comportamiento y también cómo está trabajando en la sombra para aprovechar la oportunidad cuando esté preparado. Después de una temporada complicada y un enero de incertidumbre entre sus problemas físicos y una posible cesión, la seguridad que le da tener contrato hasta 2028 debe impulsarlo para ganarse un hueco en la planificación del centro del campo deportivista de cara a la próxima campaña.

 

Incógnita Genreau

En todo caso, la gran incógnita por resolver es Denis Genreau. Primero por ser el último en llegar y segundo porque también se trata de una apuesta importante del club blanquiazul, que lo sacó de la primera división francesa para firmarle un vínculo hasta 2027 con opción a otro año adicional. Hasta el momento ha participado poco, 129 minutos, y no está muy claro todavía qué tipo de centrocampista puede llegar a ser para el Deportivo.

 

Hay sensaciones encontradas con el australiano, que hasta ahora no ha sido capaz de componer una actuación consistente y ha sido más de picos y valles demasiado exagerados. La última muestra, en El Sardinero, donde se estrenó como goleador con la camiseta del equipo coruñés para minutos después ser expulsado en una decisión, con el partido resuelto y ya en el tiempo de descuento, que probablemente no esté entre las diez mejores que haya tomado en su carrera.

 

Racing Santander   Deportivo  (166)
Genreau, celebrando su gol ante el Racing de Santander  | Fernando Fernández

La primera muestra es la de un centrocampista dinámico, quizá con mejores condiciones para acompañar a un mediocentro más posicional que para asumir él mismo la responsabilidad de ejercer de punto de partida, un rol similar al que Diego Villares ha venido desempeñando a buen nivel a medida que ha avanzado la temporada.

 

Es precisamente el capitán de Vilalba la cuarta pieza que debe resolver este puzle. Su versatilidad, y su compromiso para seguir acumulando minutos a pesar de las molestias en la rodilla que arrastra desde hace varias semanas, le permitirán a Gilsanz alternar a los tres candidatos del casting manteniendo a uno de sus puntales haciendo diferentes funciones, en caso de que no quiera probar de golpe una pareja completamente nueva en la sala de máquinas.

Genreau, Patiño y Mfulu, tres cuentas pendientes para una vacante

Te puede interesar