José Manuel García Cáceres (16 de diciembre de 2002, Algeciras), es Pepe García, el nuevo fichaje del Attica21 Hotels OAR Coruña.
El andaluz, que procede del Ciudad de Algeciras, abandonó el equipo de su ciudad para embarcarse en el proyecto herculino y así afrontar su reto más importante: ascender a la División de Honor Plata.
Antes de nada, ¿cómo estás?
De momento muy bien. Ya estoy medio asentado en A Coruña. Llegué el jueves pasado y hace un día ya que me acomodé en el piso con los compañeros para empezar esta etapa.
¿Te ha dado tiempo a ver algo de la ciudad?
Nada (ríe). Por ahora solo me sé el autobús que tengo que coger para ir desde la casa hasta el pabellón. No me ha dado tiempo a ver mucho.
¿Qué tal con el equipo?
Genial. No conocía a nadie pero la acogida que he tenido ha sido espectacular. Todos me apoyaron desde el inicio. De hecho, se presentaron con un abrazo que es algo que yo no había visto nunca así que estoy muy contento de estar aquí. Hay muy buen ambiente.
Me hace ilusión estar aquí porque es el primer año que lucho por jugar la fase
¿Cómo se gestó tu fichaje?
Yo no esperaba ninguna llamada porque no estaba buscando equipo. Pero me llamó Jacobo (Novoa, director deportivo) y cambiaron las cosas. Yo estaba en mi equipo, pero ya no nos jugábamos nada, ni luchar por los puestos de la fase ni para evitar el descenso. Entonces, me llegó esta oferta bastante ilusionante. Al final, va a ser el primer año que voy a luchar por jugar una fase de ascenso, que con la edad que tengo, me hace bastante ilusión.
¿Tuviste que pensarlo?
Pensar, lo pensé bastante. Yo me decidí venir en cuanto me llamaron del OAR, pero tenía que dejar muchas cosas atrás como la familia, los amigos y mi pareja. Sin embargo, fueron ellos los que me empujaron a irme porque era una buena oportunidad.
Tuvo que ser duro pero el reto del ascenso es muy atractivo.
Claro. Además, mis padres, que son lo más cercano que tengo, ya están buscando vuelos para venir a verme algún partido. Entonces, no hay problema. Iré viendo como van las cosas pero sé que me estarán apoyando desde donde sea.
Debutaste este pasado fin de semana con una victoria ante el Lalín. Mejor imposible.
Sí. Jugamos contra el Lalín, que no se si iban quintos o sextos, pero les había visto un par de partidos y pensaba que les podíamos ganar. En cuanto le metimos intensidad, confirmé esa superioridad que me había parecido que teníamos.
¿Qué sensaciones tuviste?
Tuve muchos nervios (ríe). No estoy acostumbrado al frío de Galicia a pesar de que los compañeros me dijeron que hacía calor (ríe). Entré bastante frío y tenía bastantes nervios por la presión de la primera vez, pero solo fueron cinco minutos hasta que me acomodé en el campo y ya empecé a jugar bien.
Vienes del Grupo F, aunque aún es pronto, ¿notas alguna diferencia entre los grupos?
Todavía me queda mucho por ver pero si que es verdad que en el grupo F apenas hay diferencias de resultado. El partido que puedes perder por más goles es por cinco o seis. Allí el grupo es más competido. Aquí, cuando me llamaron y empecé a ver los resultados, vi que había palizas y es algo a lo que no estoy acostumbrado.
Se compite diferente.
Claro. No sé si es solo Coruña o todos los equipos, pero allí es un juego más lento, mientras que aquí la intensidad es máxima. Corres por todo y defiendes muy arriba. Apenas tienes tiempo para descansar.
Aquí prima mucho la defensa.
Sí. En los pocos días, que llevo aquí, pude ver que nuestro juego se basa en la defensa. En cuanto tenemos una buena defensa, subimos arriba rápido para finalizar. Tenemos muy buenos extremos y también laterales con mucha calidad. Ahora que llego yo, voy a intentar ayudar en lo que sea.
Sin ser un diez, me desenvuelvo bien en cualquier puesto de la primera línea
¿Qué le vas a aportar al OAR?
Yo me desenvuelvo medio bien en cualquier puesto de la primera línea. No soy un jugador diez en ningún lado pero si soy un siete en los tres puestos de la primera línea. No suelo perder muchos balones. Intento seguir el balón casi siempre. Además, puedo darle descanso al que sea que eso es súper importante. Este año, la primera línea del OAR está muy corta de efectivos y dar un respiro a un jugador puede ser gloria.
¿En qué posición de la primera línea te sientes más cómodo?
Bueno, yo siempre me he ido intercalando entre el lateral izquierdo y el central, pero aquí me han llamado para el central. Intentaré dar más juego y mover más la pelota. Estoy muy cómodo de central.
¿Hay alguna faceta en la que quieres trabajar más?
Sí. Me queda por mejorar muchas cosas pero en especial la defensa. También tengo que mejorar en llevar el tempo del partido y tomar mejores decisiones. Ahora que he venido a un buen equipo, seguro que mejoraré mucho en esos aspectos.
En los entrenamientos, me di cuenta cuanto desean estar en la fase
Todo eso que mejores ayudará al equipo a estar en la fase. ¿Confías en lograrlo?
Por supuesto que confío. Desde que llegué y vi la intensidad en los entrenamientos, me di cuenta de cuanto desean estar. Vamos a luchar todos los partidos y espero que tengamos la recompensa de jugarla.
Ya llevan los dos años jugando la fase, pero sin ascender. ¿A la tercera irá la vencida?
Ojalá. Espero que sea llegar yo y besar el santo.
¿Un sueño por cumplir?
Ascender a División de Honor Plata. Al final, contando desde que me subían al primer equipo siendo juvenil de primer año, llevo cinco años jugando en la Primera Nacional. Me haría mucha ilusión ascender. Hablando del futuro, me gustaría vivir del balonmano unos cuantos años. Me gustaría jugar en Plata e intentar llegar a Asobal, pero eso es más difícil. Ahora mismo, lo que quiero es subir y jugar en Plata.
