Sin haber encontrado todavía un equipo en el que competir el próximo curso, la pretemporada de Lucas Pérez está siendo tan llamativa como peculiar. Tras finalizar su aventura en el PSV Eindhoven después de que una tuberculosis le apartara definitivamente de los terrenos de juego la pasada campaña, el delantero coruñés comenzó su preparación veraniega sobre el césped de O Carrizo, la casa del Portazgo SD. "Él lleva bastante tiempo parado, dos meses prácticamente por lo de la tuberculosis, y lo que intento hacer es lo más parecido a una dinámica de equipo. Volvimos a un par de semanas de estructura, de que volviese a coger esos estímulos de fuerza y esas sensaciones en el campo para empezar a trabajar duro", explicó a DXT Campeón a principios de junio Alex Salmerón, coach de futbolistas de élite y el encargado de mantener a Lucas en forma desde su salida del Deportivo.
Tras unas pequeñas vacaciones, el de Monelos volvió a la carga pero esta vez lo hizo de una forma que sorprendió mucho a la afición deportivista: con el escudo del Racing de Ferrol sobre el pecho. Según desveló Manuel Ansede, presidente del club verde, Lucas solicitó unirse a los entrenamientos del primer equipo porque necesitaba seguir preparándose para poder competir. Justo en ese momento, el Racing estaba incorporando a gente nueva a la plantilla que competirá en Primera RFEF el próximo curso, y consideraron que la petición era compatible porque podría ayudar a realizar los entrenamientos. "Es un beneficio mutuo, estamos muy contentos y nosotros siempre damos facilidades a los jugadores gallegos", explicó Ansede durante la presentación de Jairo Noriega. Este 'fichaje' sorpresa hizo que la gente pronto comenzara a especular sobre la incorporación oficial de Lucas al equipo ferrolano, pero el presidente se cansó de explicar qué esa opción no estaba sobre la mesa. En la mañana de este martes se conocía la noticia de que el delantero había trasladado su preparación a la capital, y esa misma tarde se le ha podido ver ejercitándose con el Rayo Majadahonda.
Allí militó la pasada temporada Pedro Mosquera, compañero de Lucas en el Deportivo durante las temporadas 2015-16 y 2017-18. Además, durante esas campañas también formaba parte de la plantilla blanquiazul Alejandro Arribas, el cual junto a su familia, era propietario del equipo madrileño hasta que en febrero decidieron vender el club a Javier Ruiz Poo, un empresario mexicano de 37 años, a la vez que completaban la compra del Cartagena.
Como ya se ha mencionado en muchas ocasiones, a Lucas Pérez le une un gran vínculo familiar con Madrid, y mientras estudia ofertas continuará su puesta a punto en Cerro del Espino. Según Marca, hasta el momento el coruñés ha recibido ofertas de conjuntos de la MLS de Estados Unidos y de Arabia, pero en un principio su deseo sería mantenerse cerca de A Coruña y de Madrid.