Luis Moya (23 de septiembre de 1960, A Coruña), a pesar de estar retirado sigue ligado al deporte que le dio todo: los ralis.
El copiloto coruñés no pierde ocasión para hacer algo relacionado con los coches, como demostró el fin de semana pasado yendo a unos cursos en Suecia, donde aprovechó para seguir, por medio de su teléfono, el Rally de Suecia, en general y la actuación de Roberto Blach, en particular.
El pasado fin de semana has estado en Suecia con Volkswagen, ¿qué estuviste haciendo?
Vamos a unos cursos muy divertidos y organizados por parte de Volkswagen Driving Experience, que es la experiencia de conducir de Volkswagen. Yo soy embajador de la marca en España. Entonces, en Suecia se hace el primer evento del año, pero todo está coordinado por los alemanes. Por ejemplo, yo estuve con un grupo de prensa y luego con un grupo de clientes, que pagaron el curso.
¿Dónde practicais?
Nos vamos a un lago con un Golf. En este caso, llevábamos un Golf R y un Golf R 20 aniversario, que es uno que tiene trece caballos más. En lugar de tener 320, tiene 333. Estamos allí, vamos en parejas con el coche, en mi caso fui con el jefe de ventas de la línea R de Volkswagen, que me pidieron ir con él. Entonces, nos vamos turnando y vamos conduciendo en hielo, en un lago, con ruedas con clavos. Es algo divertidísimo y, además, se aprende mucho a tener el control sobre el coche.
¿Cómo fue la experiencia de ir con alguien no profesional al volante?
Fue muy bien. Para mi es la cuarta vez que voy. Ya me defiendo bastante bien en el hielo. Este hombre que venía, Jan el alemán, se subía al coche y la verdad, es que me di cuenta de que no tenía mucho control con el coche, pero poco a poco, y sin decirle nada al principio para que se vaya acostumbrando. Luego, le pregunté si esquiaba y me dijo: sí, ¿Luis, por qué lo preguntas? Yo le dije que empezaba a tener el control de los pesos.
Todos los coches, cuando conduces, el movimiento de masas es muy importante. Yo, cuando freno, se que el peso va para adelante, cuando acelero va para atrás y cuando giro va para el lado contrario. Eso, los esquiadores, lo tienen interiorizado. Por eso le pregunté si era esquiador. Yo me daba cuenta de que cuando giraba para un lado, cargaba para el otro y con eso, mejoró muchísimo. La verdad es que todos los clientes que vinieron, en este caso el alemán, eran carreristas. Algunos eran veteranos con hijos que compiten en resistencia con coches buenos y la verdad, es que la experiencia fue extraordinaria. Luego, otro día, se hace una competición por tiempos.
¿Te volvió a picar ese gusanillo de competir?
No. Para competir no porque me lo paso muy bien haciendo esto. Eso sí, yo tengo mucha amistad con Carlos (Sainz), y cuando hablamos siempre me dice: Oye Luis, tendremos que hacer un rali juntos. Yo le digo que cuando él quiera, que yo estoy dispuesto. Yo, por ejemplo, competir como él en el Dakar, por puntos, pues me da más pereza, pero hacer una carrera con él, me encantaría. Tengo ganas de hacerlo, pero esto no tiene nada que ver. Aquí voy yo conduciendo, me lo paso bien, me divierto y no se me da mal. Aquí estás derrapando unos días, con todo bien organizado. El hotel también tenía gimnasio, así que podía hacer deporte. Estuvo muy bien.
Además, pudiste probar un coche eléctrico. ¿Cómo se siente?
Hay que hacer mucha pedagogía con los vehículos eléctricos. El coche eléctrico, el par motor que tiene con la entrega de potencia en inmediata. Es como cuando tú llegas a tu casa, le das al interruptor de la luz y ésta llega de golpe. Sucede algo parecido con estos coches. Tienes que tener tacto con el acelerador. No es un encendido o apagado. Hay que controlarlo bien. Allí, en Suecia, usamos un eléctrico para que las personas lo vean. La conducción del eléctrico hay que interpretarla, no hay que sacarse el carnet de conducir de nuevo, pero hay que interpretarla y saber que el consumo es al revés que uno de combustión. En un coche de gasolina o diésel, consume más en ciudad, pues el eléctrico lo hace en autopista. En ciudad, podemos llegar a alargar la autonomía del eléctrico porque, cuando yo freno, el coche carga. En los vehículos, por ejemplo, de Volkswagen tienen dos modos de conducción: la D de Drive y la B de Brake. La D es como avanzar y la B regenera más carga todavía. Por eso hay que tener tacto porque cuando yo voy conduciendo en la posición B y levanto el pie del freno, se enciende la luz de Stop y frena. Si no hay ese tacto, al copiloto lo llevaría moviendo el cuello todo el rato.
¿Son el futuro de los ralis?
En los ralis, ya está corriendo con híbridos. En el rallycross, se corren con eléctricos. Yo creo que, si todos pensamos que hay un acuerdo en París del 2050, que no solo habla de reducir la emisión de los gases efecto invernadero sino también, en el artículo 2 del Acuerdo de París, de erradicar la pobreza en el planeta. Todos debemos de estar de acuerdo con eso.
Además, en el 2035, se prohíbe, en la Unión Europea, la comercialización de vehículos de combustión, que no quiere decir que no puedas circular con un vehículo de este estilo si lo tienes, pero lo limitarán.
Algunos también hablan de los coches de hidrógeno.
El año pasado, a mes de julio, solo se había vendido un coche de higrógeno en España. Aquí, hay tres hidrogeneras públicas: una en Zaragoza, una en Sevilla y otra en Madrid. Circulan menos de veinte coches. Es verdad que el hidrógeno es la materia más abundante en el planeta y que el coche emite vapor de agua, pero también es verdad que el depósito de hidrógeno es tres veces mayor que un depósito de gasolina o diésel. Si alguno marca quisiera apostar por él, tendrían que empezar muy rápido porque, el 2035 está a la vuelta de esquina. El 1 de abril, Akio Toyoda, el CEO de Toyota, cede su puesto a Koki Sato, porque éste tiene más idea de ir por lo eléctrico. Entonces, yo cuando veo que las marcas como Volkswagen, Audi, Porsche, BMW, Mercedes o Tesla están trabajando en vehículos eléctricos, me cuesta creer que estén equivocados.
Al final, con estos pasos hacia lo eléctrico, pueden llegar nuevas marcas a los ralis.
Seguro. Sería buenísimo que vinieran nuevas marcas. Ese es el gran objetivo de la Federación Internacional de Automovilismo y de las marcas. A todas ellas les interesa competir contra más competidores. Es muy importante que haya más marcas lo que pasa ahora hay lo que hay, solo tres compitiendo. Es una tecnología que comparten ellos, excepto el motor que cada uno tiene su motor. Ojalá, en un futuro cercano, haya más vehículos en el Mundial de ralis. Y, ¿por qué no con vehículos eléctricos?
¿Aprovechaste tu estancia en Suecia para ir a ver el rali?
No, porque nosotros estábamos en Arvidsjaur, a unos trescientos kilómetros de Umea. Además, yo estaba allí para hacer un trabajo de estar con clientes, con prensa… y no tendría tiempo para desplazarme. Además, como me gusta entrenar, acababa el día y hacía algo de deporte y luego cenaba con todos ellos. Fue muy entretenido.
Aunque no lo pudiste ver, ¿lo seguiste?
Eso sí. El rali lo seguí todos los días. Hoy en día, con la tecnología puedes ir mirando los tiempos. Me encanta mirarlos, analizarlos, ver quien va delante.
Viendo los tiempos, ¿quién fue el que más te impresionó?
Un amigo, antes del rali, ya me había preguntado a quien veía favorito. Yo le dije que Ott Tänak. Fue por una razón muy sencilla, salía atrás. De hecho, en Montecarlo, yo había apostado por Sébastien Ogier y ganó. Cuando lo hizo, le mandé un mensaje y le dije: Seb, enhorabuena porque esta victoria tendrá un sabor especial porque no tendrás que abrir carretera y ser el primero en Suecia. Su contestación fue: Luis, es la mejor victoria que he tenido en Montecarlo.
El que abre pista en Suecia, es prácticamente imposible, ganar el Rally de Suecia si sales primero. Imposible, por muy bueno que seas. Sin embargo, Tanak salía quinto y lo hizo. Ahora, van a México y allí Ogier saldrá quinto. Kalle Rovanperä me rompe todos los esquemas porque es un piloto extraordinario, magnífico y sale segundo, que tampoco es buena posición de partida en México porque se limpia la carretera. Yo, allí, apostaría por Rovanperä, aunque salga segundo, o por Ogier.
Además, también debutó Roberto Blach. ¿Qué consejos le das para el Mundial Júnior?
Estuve mirando todos sus tiempos, desde el principio. Lo comparaba siempre con el que ganaba el ganaba el rali, con William Creighton. También me sorprendió Laurent Pellier, que iba muy deprisa. Había un gran nivel. Está un poco lejos, porque estaba a tres segundos por kilómetro, que es bastante. Hubo un tramo, en el segundo día, que se quedó a dos por kilómetro y fue mejor. Es una distancia grande, pero hay que entender que era la primera vez que corría en Suecia y es un rali muy complicado. Yo cuando fui por primera vez, con Carlos, nunca habíamos corrido en nieve y llegamos e hicimos el scratch pero era Carlos Sainz. Entiendo que es un rali muy difícil. Lo importante y lo mejor de todo es que terminó. Eso es muy importante porque hay que hacer kilómetros, pasar los tramos con el copiloto corrigiendo notas, es una recorrido muy duro.
Él hablaba de tener este año de experiencia e intentarlo con todo el que viene…
Eso me parece muy bien. Quizás, podía haber apretado un poquito más. Todavía no he podido hablar con él ni con Mauro Barreiro, y no sé la estrategia que seguían. Lo importante, es que no competió ningún error. Suecia es un rali tremendamente complicado porque se va muy deprisa, con algún tramo que la velocidad era de 139 kilómetros por hora de media.
¿Echas de menos alguna prueba en el calendario?
A mi gustaría que el Rally de España se hiciese todos los años. Lo tenemos aquí, está cerca de casa, en mi caso que vivo en Barcelona lo tengo al lado. Es una pena que este año no se haga, pero estoy convencido de que volverá porque aquí hay mucha acción. El RACC, que es el organizador, lo hace muy bien y estoy convencido de que volverá. De momento, no lo tenemos así que tendremos que acercarnos a Portugal si queremos verlo.
¿Cambiarías algo de la actual competición?
Lo que me gustaría sería ver más marcas. Yo creo que la Federación y los equipos trabajan en la misma dirección e intentan hacer las cosas lo mejor posible. Lo que pasa, es que es un deporte complejo.. Me gustaría que entrasen más marcas y que vayan cambiando de rali. Me encanta que visitemos Kenia porque cuando se hace un Campeonato del Mundo de Ralis, tendría que haber un rali por continente. Por ejemplo, este año tampoco se va a hacer Argentina y es una pena, porque allí hay mucha afición. Eso sí, entiendo que los equipos tengan que mirar los costes y los presupuestos de los viajes y no será sencillo. No tengo ninguna duda de que España y Argentina volverán.
Con todo tu conocimiento, ¿te animarías a ser mentor de algún piloto o copiloto?
No. Yo siempre, desinteresadamente, ya hablé con pilotos. Cuando estuve con el equipo de España aportaba mi experiencia, pero ahora tengo una vida tranquila como embajador de Volkswagen o como imagen de Abanca. Si me piden algún consejo claro que se lo doy, pero estar siguiendo un campeonato entero, no lo veo.
Un objetivo para este año
Yo tengo un objetivo, pero no solo para este año, sino para toda la vida: llegar lo más lejos posible en el mejor estado de forma. Eso es lo que importa, sobre todo después de los dos aneurismas que tuve en el 2018. Mi alegría es hacer deporte y seguir con mi vida.
