Redoble de tambores. A Coruña y el deportivismo afrontan la recta final antes de que se dirima la ida de semifinales del playoff de ascenso a Segunda, que medirá mañana al Deportivo con el Castellón en Riazor a las 19.00 horas.
La hinchada herculina ha respondido a la iniciativa, entre otros de la Federación de Peñas del Deportivo, denominada “A Coruña tínguese de azul” y ha comenzado a engalanar sus ventanas con los colores blanquiazules.
En redes sociales muchos seguidores comparten orgullosos el aspecto de sus fachadas, con las banderas ya ondeando al viento. No solo en las casas, también en las marquesinas se dejan ver los mupis con motivo del playoff, colocados por Estrella Galicia, que además ha lanzado una línea de botellas conmemorativas de la fase de ascenso.
Una larga previa
La ciudad herculina, al igual que su área metropolitana, que respiran deportivismo por sus cuatro costados, cogen aire de cara a un fin de semana de emociones fuertes y cuentan las horas ya para la previa del encuentro. Aunque la cita no es hasta las 19.00 horas, ya a las 12 se ha convocado a los seguidores a una ‘quedada’ en la calle San Juan.
Desde ahí, a las cuatro, la marea blanquiazul tiene previsto desplazarse hasta la plaza de María Pita. Desde allí, habrá un corteo hasta la puerta 0 del estadio herculino.
La afición allí concregada, más todos aquellos que posteriormente se vayan sumando, estarán esperando para recibir al bus del Deportivo, previsto para las 17.00 horas.
La recepción, multitudinaria, espera arropar al equipo herculino y llevarlo en volandas a una victoria fundamental para las aspiraciones del Depor de pasar de ronda.
Los seguidores, después de un 2023 en el que los coruñeses solo fueron capaces de ganar un duelo a domicilio, el pasado 19 de febrero al descendido Talavera, saben que del campo coruñés no se puede escapar el triunfo para ir con margen a Castalia. Y para abrir boca, los colores blanquiazules ya toman las calles coruñesas.
