Alberto González, técnico del Linares, y Óscar Cano, entrenador del Deportivo, se conocen desde muy jóvenes, cuando ambos se formaban para desarrollar su futura trayectoria profesional en los banquillos. El estratega del conjunto de Linarejos, nacido en la localidad malagueña de Tolox, coincidió por primera vez con su homólogo deportivista en Granada, ciudad de la que es Cano.
“Sobre 2002 fui a estudiar allí la carrera de INEF (Ciencias de la Actividad Física y el Deporte), él entrenaba a un equipo de Granada y coincidimos en formaciones y cursos en la Universidad durante muchos años, porque él iba a formarse”, relata González en una entrevista con este diario.
Coincidimos en formaciones y cursos en la Universidad en Granada durante muchos años; y después, en el Betis
“Además, durante los ocho o nueve años que estuve en Granada, dirigí a varios equipos y nos tocó enfrentarnos en bastantes ocasiones, ya que él también estaba empezando en los banquillos. Pero luego él dio el salto a Segunda B, empezó a entrenar al Granada, al Poli Ejido, al Barça B, mientras que yo estuve más tiempo en Tercera y ya no volvimos a coincidir en el campo”, comenta el estratega toloxeño.
Reencuentro en el Betis
Sus caminos volvieron a cruzarse en 2012 en el Betis: “Yo estaba en la dirección de la cantera y él entrenaba al filial”.
El técnico del Linares subraya el “mimo” con el que Cano “trata cada situación”.
“Le tengo bastante aprecio, además de un compañero, soy amigo suyo, porque le conozco desde hace muchísimos años, y sé lo mucho que trabaja y el mimo con el que prepara cada situación, cada partido”, comenta González sobre su homólogo blanquiazul.
“Es un gran conocedor del juego, una persona que ha dedicado mucho tiempo a analizar qué pasa dentro de un campo de fútbol y cómo se relacionan las personas, que considero que son los factores importantes”, profundiza.
“Me gusta la esencia que tiene del conocimiento del juego y de los jugadores”, añade el malagueño sobre el preparador granadino, quien, además, valora que “a todo esto hay que unir que durante los años que lleva entrenando, Cano se ha ido haciendo conocedor de cómo funciona esto, la categoría... y eso da un plus”.
Me gusta la esencia que tiene del conocimiento del juego y de los jugadores. ¿Que se puede equivocar alguna vez? Claro, como nos equivocamos todos
“¿Que se puede equivocar alguna vez? Pues claro que puede, como nos equivocamos todos, pero es un gran entrenador, un gran profesional y estoy seguro de que su trabajo lo va a hacer bien”, sentencia Alberto González, quien confía en que el nazarí está capacitado para “ascender con el Depor, aunque tenga que ser a través del playoff”.
“Entiendo que la afición pueda haberle pitado o que haya críticas, aunque no lo comparto porque veo el fútbol más desde el punto de vista profesional y entiendo que hay que estar unidos hasta el final, pero la afición es soberana y hay que respetar cómo expresa su opinión”, afirma.
En este sentido, explica que “los profesionales tenemos que estar en otra línea. Es desde dentro donde hay que ser más profundos en los análisis y ver por qué pasan las cosas”.
“Estoy convencido de que, en ese sentido, en el club deportivista estarán haciendo bien las cosas y si no se asciende de manera directa, todavía les queda el playoff y tienen que trabajar por el objetivo del ascenso”, argumenta.
“Ahora, el entorno debe estar unido, porque todavía quedan tres jornadas y el playoff, si no ascienden directos. Es decir, lo importante”, insiste, y asegura que “ya al final de temporada es cuando deben sacar conclusiones y mostrarse críticos si lo consideran”.
Sonó para el Depor el pasado verano
González sonó el pasado verano como una alternativa al blanquillo blanquiazul, cuando no estaba clara la continuidad de Borja Jiménez.
“No sé cuánto había de verdad en eso, pero simplemente el rumor te hace sentir orgulloso y es un halago enorme porque después de muchos años trabajando en el barro, que un día pueda llegar un equipo como el Depor o se plantee simplemente poder contar contigo, es un motivo de orgullo y de seguir trabajando porque a lo mejor algún día puede llegar, por qué no”, confiesa el preparador del conjunto de Linarejos, adversario del Deportivo el domingo.
El primer entrenador en teletrabajar en el fútbol español
La reciente separación conyugal de Alberto González le llevó hace unos meses a protagonizar una curiosa situación, ya que se convirtió en el primer técnico en teletrabajar en España.
“Necesitaba compaginar una semana en Linares y otra en casa, en Tolox, para poder tener la custodia compartida de mis hijas y poder estar con ellas, y el club me ofreció la posibilidad de teletrabajar —explica, aunque fue una situación que duró mes y medio. Desde hace dos meses ya trabajo normal”.
“Creo que en el fútbol no es factible. Tienen que darse unas circunstancias muy particulares para poder salvarlo. En mi caso, yo tenía el respaldo del club, de la afición, era mi tercer año aquí y mi sistema de trabajo y de juego estaba afianzado, pero no es la situación ideal”, expone.
“El peso de los entrenamientos lo llevaba mi segundo, que es mi hermano Enrique. Pero antes del teletrabajo, él ya dirigía las acciones de estrategia. La diferencia es que en ese momento, él dirigía todas las tareas, pero con unas pautas que hablábamos entre los dos”, comenta.
“Sólo dirigí dos partidos desde la distancia, en Vigo y Madrid. El de Vigo era el primero y salió mal porque la señal llegaba con 30 segundos de retardo, así que cuando intentaba corregir algo, iba por detrás. Contra el Castilla ya se corrigió y fue mejor porque era como cuando te han expulsado y estabas viendo el partido desde la grada”, narra.
