Diego Villares modificó su posición en el terreno de juego el pasado fin de semana ante el San Sebastián de los Reyes. El técnico, Borja Jiménez, optó por situarle esta vez por delante de la defensa, con una mayor participación en la salida del balón. Fue el director de orquesta blanquiazul.
En el terreno de juego le escoltaron Álex Bergantiños, y el colombiano Juergen Elitim. Coincidió justo en el partido posterior al del malentendido entre Jaime Sánchez y el capitán blanquiazul que costó un gol en la cita con el Real Unión de Irún.
El entrenador José Ángel Salgado, ‘Peli’, analiza para este diario ese cambio de rol del centrocampista de Villalba.
“Borja, lo que busca, es dar una salida mucho más limpia al balón con un jugador que tiene esa capacidad, a lo mejor más que Álex Bergantiños, para jugar con menos contactos y con mayor precisión. Así, se garantiza, por delante, con Álex, un jugador que interpreta y lee bien las posibles pérdidas para prever cualquier situación y estar equilibrado a la hora de perder el balón”, precisa.
Peli incide en que Villares puede aportar “muy buena salida” al equipo “por su calidad técnica”, al tiempo que “interpreta muy bien los espacios ante la presión adelantada del rival para jugar con dos o tres contactos”.
El Deportivo también recurre a la salida Lavolpiana. “Ante presiones avanzadas, adelantadas, de los rivales, hay un factor muy importante en ese tercer jugador, ese mediocentro que inicia la salida con los dos centrales, la lateralización, ser capaz de orientarte bien ante una presión (adelantada) y jugar rápido y con precisión. Es indudable que ahí Villares tiene una facilidad más efectiva que Álex en ese sentido”, sostiene el técnico.
Eso sí, precisa que la opción de Villares, perfecta ante la presión adelantada del rival, no es idónea en todas las circunstancias. “Depende del plan de partido. Creo que hay encuentros en concreto en que a lo mejor necesitas un juego mucho más directo o ser capaz de ganar campo contrario de manera mucho más vertical y a la vez ser más posicional en el centro del campo, con un jugador más especifico en eso”, advierte ‘Peli’. Ese sería el perfil de Bergantiños, pero Villares puede, incluso, asumirlo porque “entiende muy bien el juego tanto con balón como sin él”. “Tiene capacidad para elaborar, pero también para lo contrario, para interpretar los espacios a la hora de defender”, admite.
Peli ha sido testigo de la evolución del jugador lucense, que llegó al Fabril desde el Racing Villalbés y la temporada pasada dio el salto al primer equipo blanquiazul con una ficha profesional.
“Es un jugador que a lo largo de su carrera fue evolucionando. En el Villalbés jugaba mucho en banda izquierda o mediapunta y ahora lo vemos más en esa función de mediocampo, ya sea de interior en 4-3-3, en la posición de ‘6’ o en 4-2-3-1 acompañando a otro medio”, razona.
En todo caso, deja claro que tiene “debilidad” por Villares, el director de orquesta del Deportivo en el partido ante el San Sebastián de los Reyes, el que llevó la batuta por delante de la zaga.
“Me parece un futbolista muy inteligente y con mucha capacidad para leer y entender el juego. Si a eso le sumamos calidad técnica a la hora de combinar, de saber elegir la pausa, el cambio de ritmo ofensivo a través del pase, control o conducción, en determinados contextos puede dar soluciones para variar esa posición de ‘6’ en función de si quieres que sea una propuesta más ofensiva o defensiva”, argumenta ‘Peli’.
Ante el Sanse, Villares recuperó la titularidad después de haber sido suplente en la cita con el Real Unión.