Solo vistió una temporada la camiseta del Deportivo y solo vivió un año en A Coruña, pero el club y la ciudad le marcaron. Desde que se fue han sido numerosas las visitas que ha hecho a la capital herculina. Víctor Mollejo tiene buenos amigos aquí y le encanta visitarles, pasar buenos ratos con ellos y pasear por las zonas que más le gustan: el centro, la Plaza de Lugo, la de Vigo, el Paseo Marítimo... Mientras disfruta con sus colegas, hace un paréntesis para atender a este diario. Hoy se marcha de nuevo, pero no tardará en volver. “Dentro de diez días estaré por aquí otra vez. Tengo muchos amigos y me apetece venir”, confiesa.
Un ascenso es para toda la vida y un descenso, también; te va a dejar huella
¿Qué tiene A Coruña para que vengas tantas veces?
Hice muchos amigos aquí y tengo muy buena relación con ellos. Además, me gusta mucho la ciudad.
¿Qué zonas de la ciudad te gustan más?
Siempre ando por el centro, la Plaza de Lugo, la de Vigo, la Marina, el Paseo Marítimo....
¿Te han parado mucho por la calle estos días?
Hay gente que se acuerda de mí, pero aquí hay mucha tranquilidad, como siempre. En A Coruña, la gente a los jugadores los ha dejado siempre muy tranquilos.
¿Qué te dicen, que vuelvas al Deportivo?
Sí, me dicen que me venga. Yo les digo que ahora no puede ser pero ojalá en el futuro pueda venir otra vez al Deportivo.
Hice muchos amigos aquí y, además, me gusta mucho la ciudad
Ha sido solo una temporada pero parece que A Coruña y el Depor te han dejado marcado y también tú a los aficionados.
Yo me identifico mucho con el club y con la gente, con los aficionados. Me trataron tan bien... Y cuando estás feliz en un sitio, te apetece volver.
¿Cómo ha sido la temporada para ti, primero en Getafe y después en Mallorca?
Ha sido una temporada difícil en lo personal. En el Getafe apenas jugué (cuatro partidos de Liga, todos como suplente) y cuando llegué al Mallorca el equipo iba primero y era difícil entrar en los onces, pero allí noté más la confianza del míster y he sumado minutos y dos goles (jugó diez partidos, cuatro como titular).
¿Cómo ha sido la experiencia del ascenso?
Pues única. Venía de haber vivido la temporada pasada todo lo contrario con el Deportivo, un descenso, que es algo muy duro, y esta temporada me tocó vivir la parte bonita que es un ascenso.
Hay gente que se acuerda de mí por la calle, pero aquí hay mucha tranquilidad
¿Dónde te ves la próxima temporada?
Me veo en Mallorca, que tengo contrato (segundo año de cesión por parte del Atlético de Madrid) y mucha ilusión de poder seguir demostrando ahí que, con una pretemporada por delante, puedo aportar mucho más.
¿Has estado pendiente del Deportivo?
Lo he seguido todo el año. Al principio, estaba muy ilusionado. Fernando Vázquez empezó haciendo un trabajo muy bueno, pero cuando bajas a Segunda B y eres el Depor, te exigen lo máximo. Me dio pena la destitución de Fernando. Luego, el nuevo entrenador, después de unos partidos de aclimatación, lo hizo muy bien, no pudo meterse en playoff por la racha que había tenido el equipo, pero al final se ha visto lo que es esta categoría. Yo creo que se han dado cuenta de lo que requiere la Segunda B. Este año se hizo un muy buen equipo para Segunda B, pero por circunstancias no han conseguido el objetivo. En esta categoría hace falta una mezcla de todo, de experiencia y juventud, hacer un buen grupo, y muchas veces se necesitan sobre todo futbolistas con ilusión y ganas de crecer.
A Fernando Vázquez le tengo un cariño especial y le deseo lo mejor
Aquí parecía que iba a ser una temporada de paso para el Deportivo en Segunda B, pero...
Ese es un poco el problema, pensar que vamos a estar de paso. Yo creo que ahora es un momento para renovar todo en el club, para ver qué hace falta. Este año no pudieron subir pero por lo menos habrán sabido lo que hace falta en Segunda B.
El formato de esta temporada, un año marcado por la pandemia... El Deportivo es un poco el ‘pupas’, como se le decía también al Atlético.
La Segunda B es muy difícil. Cuando estaba en ‘Atleti’ B nos dimos cuenta de que hay mucho nivel y es complicado ascender. Para el Deportivo este año ha sido de transición y el que viene ojalá se consiga el ascenso.
Empezó muy bien, pero, cuando bajas y eres el Depor, te exigen lo máximo
Además, Riazor ha estado vacío o con muy poco público por las restricciones de la Covid-19.
Eso influye mucho porque, con la afición de Riazor, sacar adelante los partidos de casa habría sido más fácil para el Deportivo.
¿Te ves en el Deportivo en el futuro?
Yo confío en ello. Creo que es algo que va a pasar en el futuro. Todavía soy muy joven.
¿Mantienes el contacto con los jugadores que formaron parte de la plantilla esta temporada?
Sí, me llevo muy bien con Claudio (Beauvue), Adri Castro, Mujaid... Mantengo el contacto con ellos y me van contando cosas, pero hablamos sobre todo de temas personales y no del equipo.
¿Desde la distancia, has podido seguir las evoluciones del Deportivo en Segunda División B?
Siempre que he podido. Pongo la Televisión de Galicia y lo veo. Es verdad que últimamente, con la posibilidad de entrar en el playoff lo veía porque tenía más curiosidad por ver cómo lo estaban haciendo.
Yo creo que se han dado cuenta de lo que requiere la Segunda División B
¿Y cómo les has visto?
Al principio, creo que muy bien para lo que es Segunda B, pero la gente tenía unas expectativas... Por muy buen equipo que seas, no vas a ganar 5-0. Luego llegó una mala racha y, posteriormente, el intento de reengancharse a la pelea por el ascenso. Estuvieron muy cerca de meterse, pero no pudo ser. A ver si aprenden de ello para conseguirlo en la siguiente temporada.
¿Con Fernando Vázquez has conversado también esta temporada?
Sí, he mantenido contacto con él, sobre todo cuando me fui a Mallorca, porque él había entrenado al equipo. Le tengo un cariño especial y le deseo lo mejor. Es una persona luchadora, que ha peleado por el Deportivo. Ese sentimiento fue lo que le trajo al Deportivo la temporada pasada en Segunda División. Con su trayectoria, quizás no tenía la necesidad de venir en la situación en la que llegó al equipo, que era colista en la clasificación. Casi nos rescata.
Pero al final no pudo ser y, tras salir de las posiciones de descenso, el Deportivo acabó perdiendo la categoría.
Fue terrible el descenso. Te das cuenta lo que significa. Un ascenso es para toda la vida y un descenso, también. Siempre te va a dejar huella.
