La Asociación Deportiva Atlántico está de aniversario al cumplir sus primeras tres décadas de existencia. Por este motivo, varios de los componentes de esta conocida formación de la capital herculina organizó un encuentro amistoso (información del mismo en la página veinte de esta edición) que reunió a jugadores que defienden, o lo han hecho, la camiseta de esta veterana sociedad.

Manuel Serantes ‘Tusky’, presidente de la AD Atlántico, estuvo con dxt campeón para hablar de una peña que trasciende del aspecto deportivo al íntimo, ya que una de sus características son los lazos de amistad existentes entre todos sus efectivos lo que hace que la AD Atlántico sea como una gran familia.

¿Cuándo se fundó y quiénes lo hicieron?
A principios de la década de los ochenta varias personas que trabajaban en el transporte y que tenían la afición común del fútbol, entre las que se encontraban José Luis Ayala, Ramón Andrade, Ernesto (no recuerdo su apellido), Enrique Faginas y Quique Faginas; decidieron crear una peña a la que llamaron ‘En Ruta’. En aquella época la gran mayoría de los campeonatos de fútbol de peñas no existían por lo que el gusanillo de jugar se quitaba llamando a otra peña para organizar un partido amistoso.

Y empezaron a competir.
Sí ya que la cosa fue a más con el paso del tiempo y los componentes de la peña éramos muy amigos y nos gustaba jugar juntos al fútbol. Por este motivo, decidimos dar el paso de inscribirnos en el campeonato de la Asociación de Fútbol de Peñas de A Coruña, ya que muchos de los rivales a los que nos enfrentábamos en los amistosos militaban en dicha competición y nos animaban para que lo hiciésemos también nosotros y de esta manera poder jugar de una forma más regular.

La unidad es algo determinante para que continúe existiendo la AD Atlántico

En este tiempo, ¿ha cambiado la composición de la plantilla?
La gran mayoría de los componentes de la peña ha sido siempre el mismo grupo de personas en los primeros quince años de existencia. Podían entrar uno o dos jugadores nuevos como máximo alguna temporada por el hecho de que se iban otros por temas de trabajo, pero el contacto se mantenía a pesar de su marcha. El plantel ha variado un poco más en los últimos años pues pasa el tiempo y todos nos hacemos mayores, lo que hace obligado un cambio generacional en la plantilla para seguir compitiendo.

Los buenos recuerdos que tiene serán numerosos.
Sí, por supuesto. En el tema deportivo ganamos una Liga de Segunda y una Copa. Pero para los componentes de la AD Atlántico eso es algo anecdótico ya que para nosotros lo mejor de todo es la gran amistad que impera dentro del vestuario. Prueba de lo que digo fue lo que se vivió en el amistoso que organizamos para celebrar nuestro aniversario.

¿A quién se le ocurrió la idea?
Óscar Vergara y su mujer Paula, que desde siempre han formado parte de la peña, y Carlos ‘Morito’ y Sole comentaron un día que hacía tiempo que la gente no se veía y que debíamos organizar algo para reunirnos. La idea fue cuajando y programamos un encuentro en la Universidad Laboral para que los jugadores que han militado en la AD Atlántico en todos estos años asistiesen.

¿Cómo fue el reencuentro?
Muy emotivo, como te puedes imaginar. Estuvo gente que vive fuera de A Coruña y otra adelantó su regreso de las vacaciones para poder reunirse con los compañeros. Luego compartimos varias anécdotas, algo que fue muy bonito al revivir lo que contaban unos y otros.

Seguimos jugando juntos y ahora lo hacemos con el Maravillas en veteranos

¿Cuál es la clave de la continuidad de la AD Atlántico en los campos de juego?
Para mi persona lo más importante es mi familia. No obstante, te diré que la AD Atlántico es como mi segunda familia, pues he podido comprobar que la relación de los miembros que la formamos ha derivado a algo más ya que no sólo nos limitamos a ir a jugar cada fin de semana. Ahora todos somos amigos y esta amistad va más allá del fútbol. Creo, y pienso que es un sentir general dentro del vestuario, que la unidad entre todos es algo determinante para que la AD Atlántico continúe existiendo.

Ahora compiten en veteranos con el nombre del Maravillas.
Sí, hablamos con Canito (presidente del Maravillas) y no nos puso problemas. Decidimos dejar la Asociación ya que en ese torneo nos enfrentábamos a peñas con jugadores muy jóvenes a los que no podíamos seguir su ritmo. Nosotros queríamos continuar jugando juntos y es algo que podemos seguir haciendo en veteranos.