Andrés Pardo Barros (1993) no es un futbolista más. Su talento para sortear rivales e imaginarse formas de regatear está claramente por encima de la media de la categoría. El domingo lo puso en práctica en el partido ante el Victoria y fue clave en la remontada de su San Tirso (1-2). Saltó al campo en la segunda mitad, anotó el gol del empate tras una gran acción personal y mostró el camino del triunfo a su equipo.
“El gol supone una inyección de moral y de confianza, lo necesitaba mucho. No está siendo un año fácil y al acabar el partido me puse muy contento por el gol, por la victoria y por poder ayudar a los compañeros”, reconoce Andrés, que explica por qué no está disfrutando de minutos como titular en las últimas semanas: “Creo que estoy jugando lo que me merezco. No estoy bien físicamente y por temas laborales tampoco puedo entrenar todo lo que debería así que creo que los minutos que tengo son los que me corresponden”.
Protagonista
Andrés Pardo afronta su primera temporada en el San Tirso. Inició la liga como titular pero en las últimas semanas ha perdido el puesto en el once. Ante el Victoria hizo su primer gol.
Su entrada al campo ante el Victoria se produjo en medio de la reacción verde y su gol fue esencial para dejar atrás la mejor primera mitad del rival y crear el contexto necesario para el tanto decisivo de Adri.
“El resultado fue justo. Empezamos bien nosotros pero a raíz del gol el Victoria empezó a tener el control del partido. En la segunda parte salimos con otra actitud y dispuestos a remontar el partido. Luego ya con mi cambio fuimos a por todas quitando a Javi (Rey) y metiendo a Segade en el medio con Óscar y a mí con libertad. Fuimos con todo al ataque y salió perfecto”, comenta.
Andrés admite que su estilo de juego, siempre encarando y buscando el uno para uno, obliga a sus entrenadores a hacer ciertas concesiones y tener que adaptarse.
No está siendo un año fácil y al acabar el partido me puse muy contento por el gol y por la victoria
“Llevo jugando así desde que era un niño y no voy a cambiar ahora con 27 años. Está claro que para muchos entrenadores no es lo mejor, ya que para estas categorías sobre todo, en las que predomina el físico, a lo mejor no es el mejor estilo de juego pero por suerte o por desgracia es el único que tengo y la mayoría de entrenadores que tuve, quitando un par de ellos, supieron adaptarse y ayudarme en todo lo posible. Admito que no soy un tío fácil de entrenar”, asegura entre risas el futbolista zurdo.
Llevo jugando así desde que era un niño, admito que no soy un tío fácil de entrenar
Por último, Andrés analiza las opciones de ascenso de su San Tirso tras el importante triunfo del pasado domingo.
“Esta victoria es una inyección de moral para el equipo que la necesitábamos como el comer. El ascenso está muy complicado pero vamos a luchar por ello hasta el final, esto es fútbol y hasta el final hay que seguir compitiendo”, concluye Andrés.
