El Deportivo y su afición se han acostumbrado a jugar finales. No como las de hace años, aquellas con títulos por medio, pero de similar importancia. El equipos siempre ha estado arropado por sus aficionados. Esta semana, también.
Ahora en Segunda División B, el Deportivo necesita ganar al Zamora, líder del subgrupo 1A, y esperar a que los resultados en otros campos acompañen. Necesita, como ya saben todos los deportivistas, que el Celta B no gane o que Unionistas pierda. Confiar en la carambola de un empate sería un milagro. Aunque lo mismo parecía lograr el podio del subgrupo después de la derrota ante el Racing de Ferrol en A Malata, cuando el Deportivo estaba más cerca de un descenso y la posibilidad de otro que de cómo se ha plantado en la última jornada de esta primera fase de la temporada, con opciones de todo.
En Riazor solo podrá contar con medio millar de aficionados por las limitaciones que ha impuesto la Xunta de Galicia para contrarrestar la pandemia. Solo los socios protectores, aquellos que renunciaron a cualquier compensación por los partidos que se disputaron la pasada temporada a puerta cerrada y que renovaron su compromiso con el club en la actual, tienen acceso a una de las pocas entradas de que dispone el Deportivo en un estadio para más de 30.000.
Las Peñas piden el 10 %
Resulta difícil de entender que en Riazor pasen 500, cifra similar a la de otros escenarios con gradas mucho más pequeñas que la del coliseo blanquiazul. Tampoco lo entienden las peñas deportivistas. La Federación que las agrupa solicitó, sin éxito, “un aumento razonable y responsable de aforo de cara al partido con el Zamora para ocupar el diez por cien de la grada de Riazor”. Serían unos 3.200 espectadores en el municipal herculino.
Las peñas formularon su solicitud a través de la Secretaría Xeral para o Deporte, pero fue desestimada por Sanidad, según explicaron los propios peñistas en un texto que difundieron a través de sus redes sociales.
Los Riazor Blues
No queda otra que aceptarlo y resignarse. “No podremos dejar la voz este domingo, no podremos llenar las gradas, pero nunca dejaremos solo al Deportivo, Siempre estaremos a su lado. La ciudad es un clamor. Las calles hablan. Hacedlo posible. Aplasta Depor!”, escribieron los Riazor Blues.
La agrupación de seguidores deportivistas ha trasladado pancartas a Abegondo y ha pegado papeles para concienciar sobre una cita clave para el Deportivo.
