A partir de mañana el Basquet Coruña afrontará la segunda de las tres etapas de que consta esta temporada pandémica de nueva formato, una segunda fase con diez jornadas en la que se enfrentará a cinco nuevos compañeros del viaje.

De ellos, se presenta como más peligroso –sobre el papel–, el Castelló, ganador de la primera fase en el Grupo B, que contó con un participante y dos jornadas más que el A, donde el conjunto herculino acabó siendo superado por solamente el Breogán, también el único que comenzará el denominado Oro-Clasificación con una victoria más, siete, que el levantino.

Un Castelló que ha hecho de la regularidad su bandera; marca de 7-2 en la primera vuelota y de 6-3 en la segunda, que cerró con victoria por la mínima (62-63) en Granada. Sus borrones, la derrotas en casa ante el Lleida (65-74), el Girona (82-84) y por paliza contra el Palma (83-101), este último el único relevante de verdad, puesto que se presenta en la segunda fase con seis victorias de ocho posibles.

Durán, Adala, García, Stainbrook –actualmente lesionado– y Alvarado –máximo asistente de todo la LEB Oro en la primera fase– son los pilares del bloque de Toni Ten, el máximo anotador del Grupo B.

La mejor defensa

La mejor defensa de ese grupo la lució el segundo clasificado, un Granada que, pese a sufrir los rigores de la Covid-19, firmó la misma marca (6-3) en las dos vueltas, pero perdió la oportunidad de avanzar con un triunfo más al perder en su cancha contra el Castelló en la jornada final.

El equipo nazarí encajó en la fase inicial una media de 73.0 puntos, que son casi cuatro más que encuentro que la mejor defensa de lo que va de competición, la del equipo que entrena Sergio García.

Costa –el jugador más valorado de Oro–, Bropleh –tercer máximo anotador de la competición–, Fall y Murphy forman el póker de ases ofensivo del conjunto que dirige desde la banda Pablo Pin.

El Basquet Coruña abrirá el nuevo camino contra un Palma que ha ido de menos a más. Arrancó con 0-3 tras ceder a domicilio ante el Canoe y el Alicante y en casa contra el Girona. Cuatro jornadas después también había perdido en su pista frente al Castelló y el Almansa.

Tomó impulso con cinco victorias seguidas, racha iniciada en Granada, pero aun así completó la primera vuelta con récord negativo (4-5), el único de los cinco elegidos para la batalla por los playoffs.

La segunda vuelta fue otro cantar: 7-2, con derrotas en Lleida y contra Granada. Comienza con cuatro victorias. La dupla Alex Pérez-Pau Tomás tiene a sus órdenes a los dos máximos anotadores de toda la LEB Oro: Harrell y Kullamäe, y al tercer jugador más valorado, Jawara.

De más a menos

El negativo del equipo balear lo representa el Alicante, que ha ido de más a (mucho) menos. Cerró la primera vuelta con 8-1 (ganó 62-85 en Castelló) y la segunda con 3-6, incluyendo cinco derrotas en las seis jornadas finales. En las dos últimas, sin nada en juego, cayó en casa contra Real Murcia (81-105) y ante el colista Real Canoe (79-75), pese a que Pedro Rivero solo reservó a jugadores en el duelo ante el equipo madrileño.

Pitts, Llompart y Txemi Urtasun son las cabezas más visibles del subcampeón de la Copa Princesa.

Por último, el Almansa completó la primera a vuelta con 5-4, incluyendo victoria de prestigio en Palma (73-97), la única que ha podido meter en la mochila de la segunda fase, lo que prácticamente descarta al conjunto albaceteño para entrar en los siete de este grupo que disputarán las series por el ascenso.

Los dos triunfos ante el Lleida (62-67 y 80-71) le garantizaron el billete a Oro-Clasificación cuando el equipo catalán perdió el primero de los tres encuentros que debía jugar en una semana tras haber estado confinado a causa del virus.

Los interiores Cvetinovic y Maxwell –este ha jugado solo dos partidos–destacan en un plantel que cuenta con el exnaranja Carlos Noguerol.