Hubo que esperar hasta la jornada decimoséptima, penúltima de la primera fase para ver al Deportivo que muchos esperábamos esta temporada. No sólo fue la amplitud del resultado, ni siquiera la supuesta rivalidad que envolvía el choque. La buena actitud competitiva mostrada por los blanquiazules durante todo el partido, incluso en la segunda parte con un marcador franco a su favor, fue fundamental. No se atrincheraron atrás y mantuvieron la presión en campo rival buscando ampliar la ventaja.
No creo que se deba exclusivamente al acierto en la elección de los jugadores titulares. Después de muchos experimentos y forzado por las lesiones, quizás Rubén de la Barrera (RDLB) se haya encontrado con 11 futbolistas que juegan en bloque, son solidarios y buscan el gol. Pero estas coincidencias no surgen solas sino que el juego exhibido en Vigo es el resultado del trabajo en los entrenamientos. Ningún conjunto puede ejercer una presión ordenada en campo contrario si no se ha ensayado previamente. Y es ahí donde hay que reconocer el mérito del técnico. Las dos últimas victorias del RCD así como la derrota de ayer del Racing de Ferrol, no aclaran mucho las opciones de aspirar al ascenso. Bien es cierto que el Zamora, próximo rival en Riazor, tiene garantizada una de las tres primeras plazas y que al Racing y Unionistas no les sirve un empate en la última jornada para asegurarse la segunda fase de ascenso.
Habrá que esperar a que se dispute la jornada dieciocho, retrasada al 28 de marzo por los casos positivos detectados entre los jugadores del Racing, para conocer si el equipo coruñés peleará por el ascenso o por la permanencia. Es de agradecer que la RFEF haya aprendido algo del estrepitoso final de competición de la campaña pasada en Segunda (caso Fuenlagate) y tener la mínima sensibilidad para permitir que la última jornada se celebre en horario unificado.
Por último, agradecer a nuestros hermanos del Sur el apoteósico recibimiento el domingo por la mañana a la expedición deportivista por parte de la afición celeste que brincaba a ritmo de mariachi. Aunque ahora hay gente que se empeñe en negarlo, no hay que olvidar que Celta y Deportivo son los dos grandes clubes del futbol gallego. No en vano entre los dos ganaron una Liga, dos Copas de Rey y tres Supercopas. ¡Viva Galicia!
