Por fin el Real Club Deportivo de La Coruña ha escapado del pozo del descenso de categoría. No ha sido fácil, pero tampoco lo va a ser lo que aún resta de competición. Desde que Fernando Vázquez se hizo cargo de la dirección del equipo se van cumpliendo los planes que traía el de Castrofeito, primero con la salida de la cola de la clasificación, reforzando la plantilla, y después con cinco victorias consecutivas. La cuesta que le espera es intentar seguir escalando puestos e ir pensando ya en el Depor 2020-21, hasta recuperar su plaza en la Liga Santander. Él no quiere fallar y el deportivismo tampoco, que seguro se volcara en el intento.
No voy a censurar ahora los bajones que aparecieron por el Carlos Belmonte de Albacete, ni tampoco de más de un titular que no estuvo a la altura de lo que exhibieron en el Abanca-Riazor. Hay que corregirlo cuanto antes, porque de no ser por el extraordinario partido del de siempre, Dani Giménez, que lo paro todo...hasta un penalti, y del oportunista goleador, Sabín Merino, que hasta marca de pecho, porque del resto, como digo, poco se puede elogiar pese a tener enfrente a un rival que se vio un poco en el primer cuarto de hora del encuentro y poco más. El equipo se mostró seguro atrás con un entregado Víctor Mollejo que fue lateral y otra vez Aketxe volvió a mandar en la zona ancha, que es dónde se prepara la actuación ofensiva.
Y, para mantener el sistema y la entrega, llega la UD Las Palmas que llega hoy al Abanca-Riazor a partir de las l8.15 horas. con un ex deportivista en el banquillo, como es el experto Pepe Mel, además de dos integrantes de su plantilla, bien recordados por aquí por cierto, como son Rubén Castro, un goleador de primera, y Aythami Artiles, un buen central. Los canarios vendrán con la intención de recuperar algo del 0-0 de la pasada jornada frente al Tenerife.
Es lo que le espera al Deportivo que, sin perder un ápice de su actitud y aptitud, que tan buenos resultados viene sumando y que, si se mantiene el ritmo y la entrega no cabe duda que aún les esperan muchas e importantes alegrías para el deportivismo y a La Coruña. Aún quedan muchos puntos en juego y con la actual marcha del equipo las sorpresas pueden saltar en más de un partido. Como siempre...¡Forza Dépor!.
P.D.- Hay que ir pensando ya en el futuro, sin abusar de cesiones, como se vino haciendo hasta ahora, si no procurarse fichajes de los muchos que hay en Segunda y Segunda B, como por ejemplo el jovencísimo portero la Cultural Leonesa, Lucas Giffard, de 22 años. Fue uno de los héroes del conjunto leonés en la reciente eliminatoria de la Copa del Rey frente a todo un Atlético de Madrid. Ah, y no puedo callármelo, a mí tampoco me gustan las camisetas horizontales.