Pues Javier Tebas respondió a la Real Federación Española (RFEF) con un tremendo poderío, a través de una carta de ocho folios, diciendo claramente un no rotundo, chulesco e indicutible. En su escrito al secretario general federativo no deja títere con cabeza, criticando todo lo habido y por haber. Amén de dar un repaso injusto también al Deportivo que, se quiera o no, es uno de sus asociados como miembro de la Liga Nacional de Fútbol Profesional.
Pero hay más, Tebas también demuestra por activa y por pasiva que él hace lo que le viene en gana como presidente de la patronal futbolística. Ampliar a 24 equipos la Liga de Segunda División es malo económicamente para el resto y que él ha decidido definitivamente que esa opción no se contempla.
El presidente de la LFP también pone de relieve en su carta pública que sus relaciones con la Federación Española cada día van a peor y reta al organismo presidido por Luis Rubiales a que decida lo contrario, ya que él acabará en los juzgados. Veladamente viene a decir que como se les ocurra tomar una medida drástica, como el descenso administrativo del Fuenlabrada, podría haber un problema gordo entre ambas entidades. Tebas sabe perfectamente que el presidente de la Federación puede decretar la Liga de 24 equipos pese a su oposición, pero la historia está saber si a Rubiales le interesa en estos momentos una guerra abierta con los clubes profesionales.
En ente federativo saben que el poder del presidente de la LFP es grande, ya que cuenta con el apoyo de la mayoría de los clubes que configuran la organización y buena prueba de ello es que en los últimos días muchos de los dirigentes de las entidades profesionales salieron a la palestra defendiéndolo cuando el Deportivo y Numancia solicitaron la inhabilitación de Javier Tebas por abuso de poder.