El Deportivo vivió un final de mercado movido, con el anuncio este lunes de cinco nuevos fichajes, pero el resto de equipos de Segunda le fueron a la zaga en cuanto a movimientos, aunque muchos de ellos contratando nombres, sobre el papel, de mayor entidad.
Estaba claro que los tres equipos recién descendidos iban a moverse con cierta soltura en el mercado estival y así fue. El seguro de descenso y el mayor límite salarial con el que cuentan jugaron a favor de Girona, Huesca y Rayo Vallecano, que quieren regresar cuanto antes a la élite del fútbol español.
En el caso de los gerundenses presentaron hasta 16 caras nuevas con respecto al curso paso. Jugadores en muchos casos contrastados, como los de los arqueros Asier Riesgo y Juan Carlos, ex del Lugo, o los atacantes, con olfato garantizado, como Christian Stuani o Jonatahn Soriano.
Miró bastante hacia A Coruña el cuadro oscense, que se hizo con los servicios de Pedro Mosquera, al que el club rescindió de forma unilateral su contrato. El coruñés ya se ha convertido en capitán general y coincidirá con Luisinho y con otros exblanquiazules, con los que el club herculino no pudo llegar a un acuerdo: Juan Carlos Real y Pablo Insua.
Fichas libres rayistas
El conjunto de Paco Jémez, que anunció el día del choque del Depor la contratación de Leo Ulloa, una opción para el equipo coruñés en el caso de que saliese Christian Santos, dejó dos fichas sin cubrir y no descarta incorporar algún jugador que sea agente libre a la disciplina del cuadro madrileño. El Almería fue uno de los animadores del mercado, ya que con su nuevo propietario, el inversor saudí Turki Al-Sheik, no escatimó en gastos e incluso presumió en redes sociales de haberle arrebatado al extremo Arvin Appiah al United, pagando por él 10 millones.
Tampoco se quedó atrás el Sporting de Gijón a la hora de rascarse el bolsillo, pues rubricó el fichaje más caro del fútbol asturiano, con la llegada del mediocentro Manu García, procedente del Manchester City. Incorporó, además, a otros jugadores de renombre como Unai Medina (Numancia) o Javi Fuego (Villarreal).
Mientras, el Zaragoza sumó ocho caras novedosas, con el japonés Shinji Kagawa (Borussia Dortmund) como su principal baza y refuerzo para esta campaña.
En problemas
La cruz la tuvo el Málaga y sus problemas con el tope salarial, lo que hizo que solo pudiese inscribir a 17 jugadores y a tres fichajes, teniendo que rescindir a Shinji Okazaki. La excepción que confirma la regla: los rivales del Deportivo se han rearmado en este mercado.