Jose Manuel Corral ha pasado por todas las categorías del Depor. Como entrenador de los Juveniles (ascendiendo a la categoría de Honor) posteriormente al Fabril, subiendo a casi todos los jugadores del Juvenil y ascendiendo a 2ª B con un equipo muy joven. Después de dos años en el Fabril y con la llegada de J.B.Toshack pasó a ser 2º entrenador, e hizo que algunos jugadores del filial subieran al primer equipo. Tras la marcha de Toshack, llegó Carlos Alberto Silva y cuando fue cesado, se hizo cargo del equipo, en ese momento en descenso, sin haber intervenido ese año en la confección de la plantilla. Tampoco se tuvo en cuenta que había un Mundial. Muchos jugadores se iban a jugar con sus respectivas selecciones y el equipo se veía mermado (a veces se decía lo de ‘Fran y diez más’) teniendo que echar mano de cinco o seis jugadores del Fabril. Incluso en un partido en Valladolid, jugaron siete canteranos de los nueve que llevó concentrados. A pesar de todos estos inconvenientes el equipo se salvo, quedando en una posición media de la tabla cerca de la UEFA. El año siguiente llegaba otro entrenador, Irureta, y Corral continuó sin ninguna misión concreta. Al siguiente se fue con Toshack Madrid y posteriormente por la Real Sociedad. De su marcha prefiere “no hablar más”.
¿Cómo vives estos días?
Pues en casa confinado, lo que más me preocupa son las personas, que podamos pasar este mal sueño lo mas pronto posible y con el menor daño. Veo mucho fútbol a pesar de que no hay ligas, partidos antiguos, que siempre hay cuestiones para analizar. El fútbol me apasiona y me ayuda a pasar las horas.
Claro que te tienes que callar muchas cosas, ¿y quién no?
Mucho ha cambiado el Depor desde tu época...
Mucho, desde que entré en el Depor mi función ha sido de entrenador y podríamos decir que secretario técnico, ya que el club carecía de esa figura. Esto me propició algunos enfados con el entrenador John B.Toshack, ya que él me quería constantemente a su lado. Como anécdota diré que en algún partido, estando en el banquillo, a pocos minutos del final, me iba corriendo para tomar un avión para ver a algún jugador o equipo... curioso ¿verdad?. En aquel momento lo pasaba mal ya que estas y otras situaciones similares provocaban malestar con el primer entrenador, que no entendía que su segundo tuviera que realizar estas funciones. Era una situación muy comprometida para mí que me encontraba entre el presidente y Toshack. incluso me he quedado sin vacaciones casi todos los años en este club por planificar y ver jugadores... De todos modos me siento muy satisfecho de todos los fichajes en los que participé de forma muy decisiva, estando en el club : Bebeto, Rivaldo, Flavio Martins, Naybet, y ya fuera del club también se me preguntó por tres delanteros. El visto bueno lo di para Tristán. En esa misma reunión se me preguntó por si se traspasaba a Flavio al Madrid o se esperaba a revalorizarlo más. Yo fui muy contundente “traspásalo” y así se hizo. Todo esto y otros traspasos propiciaron al club mucho dinero.
¿Cuál fue el fichaje que más te satisfizo?
Todos, porque han dado al club mucho rendimiento, tanto en lo deportivo como en lo económico, pero el de Rivaldo tiene una connotación especial que voy a intentar resumir. Unos días antes de acabar la liga se me envía a Brasil para ver a un jugador, Amaral. Yo estaba en Sao Paulo pero me desplazaba a cualquier ciudad donde se celebrasen partidos y así los veía en directo. Los que no podía través de videos. Un día veo a un jugador alto, desgarbado, con un pequeño bigote que llama poderosamente mi atención. Eso que los partidos que realizó no fueron especialmente brillantes, pero le vi unas condiciones excelentes: técnica, física, potencia, rematador, buen pasador, habilidoso, buen disparo... En definitiva, muy completo. Aunque había jugadores con más nombre me decanté sin ninguna duda por el. Hablé con el ‘presi’ (Lendoiro) y se desplazó con un directivo.
Todas las categorías inferiores deben jugar con la misma idea de juego
Tenían muchas dudas porque habían visto jugar a Rivaldo en un partido. Al llegar a A Coruña, seguí presionando al ‘presi’ para que lo fichara y me dijo “no lo ha querido el Barça ni el Parma”. “¿Tienen que ser mejores los técnicos del Barça y Parma que los del Depor?”, le dije al ‘presi’. “No me interesa que digan los técnicos del Barça y del Parmaa, estoy completamente seguro de que es el jugador que nos interesa”. Me hizo caso y a la semana estaba fichado. Después se demostró quién tenía razón, pagando el Barça por Rivaldo ocho meses después 4.000 millones de pesetas y creo que costó 1.000 millones. También diré que en los casi dos meses que Rivaldo tardó en adaptarse al club tuve que escuchar de todo. Se me criticó muchísimo. Incluso Toshack tuvo muchas dudas. Después me reconoció que tuve razón.
¿Cambiarías muchas cosas en el Depor actual?
Si, creo que hay muchas cosas que cambiar. Estuve de jugador en el Barça de los 16 a los 23 años. Tuve grandes entrenadores. Buckingham, Michels. El primero me hizo entrenar con el primer equipo con 16 años. Fue el que también hizo debutar a Cruyff con el Ajax. Esto me marcó como entrenador, y mi amistad con Cruyff y Rexach, me permitió acceder a entrenamientos del primer equipo y a todas las categorías, incluso reuniéndome con ellos. Mi criterio futbolístico es que todas las categorías inferiores deben jugar con la misma idea de juego para que cuando lleguen al primer equipo conozcan los automatismos adquiridos Evidentemente el fútbol evoluciona y tenemos que aprender constantemente, nuevas metodologías a nivel técnico-táctico-tecnológico, pero la esencia del juego debe permanecer. Jugar bien al fútbol no está reñido con obtener buenos resultados, aunque hay momentos en que hay que priorizar el resultado al buen juego como ejemplo: la situación que en este momento tiene el Depor ya que los resultados son vitales... Nunca he dejado de estar en el fútbol, ya que me paso seis meses en Barcelona todos los años y asisto a entrenamientos de todas las categorías para evolucionar.
Me he quedado sin vacaciones casi todos los años en este club por ver jugadores
¿Te callas muchas cosas?
Sí, por supuesto, y quien no? (risas) pero en una entrevista no se puede comprimir todo, necesitaría escribir un libro. Algún día lo haré.
¿Crees que la afición sabe todo lo que has hecho en el Depor?
No, porque nunca lo he dicho y tampoco lo han dicho los que tenían que decirlo
¿Por qué cuentas algunas ahora?
(Risas) porque me lo estás preguntando y antes no me lo habían preguntado.
Hace tiempo, en una conversación privada, me hablaste de Rodrigo. Aún estaba en Brasil.
Ah, ¿Te acuerdas ? Es verdad. Fíjate que un año antes de que lo fichara el Madrid te comenté que vi un jugador de 17 años en dos partidos unos 15 minutos y que era diferente, lo fui siguiendo y al año siguiente lo fichó el Madrid por 40 millones.
Menudo ‘olfato’, ¿no?
Sí, tengo esa habilidad. Es intuitivo, no sabría explicarlo.