Creo que los dos equipos han planteado el partido que les interesaba en cada momento, pero la diferencia ha estado en la efectividad del Barça, que ha marcado los goles en momentos clave, como cuando ha empatado un minuto después del 0-1, aunque con un poco de fortuna porque el disparo lo desvía Saavedra, o se ha puesto por delante faltando muy poco para el descanso.

Como entrenador, son goles que duelen mucho, porque cuando visitas el Palau Blaugrana piensas que un empate es bueno al descanso. Cuando va por delante, el Barça es un equipo muy patinador y cuesta mucho perseguirle.

Ha hecho el partido que le interesaba, marcando el ritmo de partido y siendo más protagonista con la bola. Sigue siendo el favorito porque se ha ganado el factor cancha ganando la liga regular con muchos puntos de distancia. Es un equipo muy potente a nivel de individualidades.

No creo que el escenario fuese muy distinto a lo que se imaginaba el Liceo, con un poco más de posesión e intentando mantenerse dentro del marcador y buscando esos nervios del rival, pero si hubiese podido alargar ese 0-1 podría haber cambiado las cosas.

Ya en la segunda mitad, el tercero y el cuarto del Barça han llegado muy seguidos, y además el tercero justo después de que el portero parase una directa. El 4-1 es una losa para cualquier equipo contra el Barça en el Palau y todo lo que ha venido después creo que era más pensando en el lunes, aunque el Liceo se ha vuelto a meter dos veces en el partido, pero el Barça ha tenido de nuevo la efectividad suficiente para marcar en momentos claves y amarrar la victoria.

Me ha parecido que el Liceo forzaba la azul de Ferruccio, pensando no solo en estos dos primeros partidos del Palau, sino en el tercero y un posible cuarto en A Coruña. Si fuerzan una tarjeta es porque el Liceo tiene ganas y confianza en que va a alargar la eliminatoria.

Cuando la serie se traslade a A Coruña, Liceo se va a hacer muy fuerte. No veo descabellado que cada uno se lleve los partidos de su casa y que nos vayamos a un quinto.

De alguna forma, el Liceo tiene que intentar condicionar e incomodar al Barça cuando juega en casa porque estoy seguro de que en A Coruña lo conseguirá.

Los dos equipos se tienen muy estudiados, pero seguro que Juan Copa estará hábil el lunes para sorprender con variantes tácticas. Se me ocurre subir la defensa a 40 metros, aunque quizá es utópico pensar que lo pueda hacer 50 minutos, o volver a las zonas, que ya no se usan pero pueden ser buenos argumentos. El Barça se normaliza desde el disparo exterior.