El Bergantiños sufrió ante el Guijuelo la segunda derrota consecutiva después de la de la jornada anterior ante el Zamora y José Luis Lemos, técnico del cuadro carballés, analizó el último choque.
El encuentro estuvo condicionado por la expulsión de Pablo Meixús antes de cumplirse un cuarto de hora del segundo acto. “Era el minuto 59, cuatro minutos después de hacer el 0-1. Me parece excesiva una segunda tarjeta amarilla en una falta que íbamos a sacar en el medio del campo. En inferioridad numérica nos empataron pocos minutos después y, a partir de ahí, fue prácticamente imposible”.
El Bergantiños está instalado en posiciones de descenso. “Hay que tener calma y analizar lo que estamos haciendo bien, que son muchas cosas. También es cierto que las que hacemos mal son muy graves y nos están penalizando para estar donde estamos. Tenemos una línea clara de trabajo y de juego que debemos seguir y también mejorar. En esta liga, cuando enlazas varias victorias consecutivas, la clasificación cambia mucho”.
Sobre el rival, dijo que “el Guijuelo es un equipo muy sólido con un gran trabajo de presión. Tiene muy buenos futbolistas con balón, muy dinámicos y que están muy adaptados a lo que hacen en su terreno de juego, donde no perdieron ninguno de los siete primeros partidos de liga y donde solo encajaron nuestro gol. Es un equipo que sabe muy bien lo que hace y que, con esta dinámica, es muy difícil de batir”.
El Bergan hizo lo más difícil. “Trabajamos para que sucediera una situación en la que no se habían visto en su campo: estar por detrás en el marcador. Cuatro minutos después, el partido cambia con la expulsión por una supuesta pérdida de tiempo. Nos quedamos en inferioridad en el minuto 59”.
Plan ‘B’
Lemos lamentó que “justo después de hacer cambios para pasar a jugar con línea de cinco defensas porque ellos llegan mucho por fuera con centros laterales, nos empataron tres minutos después. Aunque lo intentamos y tuvimos un tiro al palo en la parte final del partido, ya era muy complicado”. Y más en un campo como el del Guijuelo. “Estamos acostumbrados porque lo tenemos en Carballo todas las semanas. Es un poco más ancho y un poco más largo, pero para los equipos que no están acostumbrados es complicado. Es una superficie más rápido incluso que la nuestra. Es un equipo agresivo, su afición aprieta mucho y allí va a ser muy complicado puntuar para un visitante. Manejan bien su papel como locales”.
