El Imperátor lo ha conseguido. Uno de los equipos históricos del fútbol coruñés ha ascendido este domingo a Primera Futgal tras una final épica en el playoff de ascenso contra el Cacheiras santiagués.
Los coruñeses llegaban al partido de vuelta con una renta de 3-1 de la ida, pero sabiendo que no iba a ser tarea fácil. El partido fue una encerrona desde el principio para el Ímper, con los locales buscando un juego a base de pelotazos que les daba resultado con dos goles en apenas veinte minutos. Antes del descanso, Álex Arias recortaba distancias para el Imperátor, que estaba ascendido con ese resultado.
En la segunda mitad no pasó gran cosa hasta el minuto 87, cuando el Cacheiras marcó el tercero a la salida de un córner y envió la eliminatoria a la prórroga. En ese tiempo extra tuvo que entrar Eloy, portero de diecisiete años del Ímper, por la lesión de Anxo. “Nosotros quisimos jugar y ellos no. Tuvimos dos ocasiones, pero no las metimos”, recuerda Alberto Moscoso, entrenador de los coruñeses.
El partido se fue a los penaltis y ahí “el que compra más boletos y quiere jugar es el que suele ganar”. Eloy tuvo su momento parando un penalti del Cacheiras, que estuvo menos acertado desde los once metros. El lanzamiento decisivo le llegaba a Rubi y el lateral no falló para dar el ascenso a su equipo.
Una celebración que empezó sobre el césped con las alrededor de 150 personas que se desplazaron a animarles y que siguió en el local del club.
“Jugaron con el escudo y no con las piernas. Son chicos que llevan diez años en el Imperátor y que quieren muchísimo al club”, resume Alberto Moscoso.