“La directiva actual está bloqueando la continuidad del club, como han demostrado con los dos últimos proyectos que se han presentado”. Antonio Quinteiro, máximo acreedor de la Sociedad Deportiva Compostela y presidente hasta el pasado junio, solo encuentra piedras en el camino en su intención de favorecer la llegada de un grupo inversor que relance al club santiagués.
La primera propuesta, en el mes de junio, fue muy sonada con Jota a la cabeza. ¿Y esa segunda de la que habla?
Es una propuesta de un grupo gallego del que forman parte futbolistas profesionales. La directiva sigue negándose. Ellos quieren seguir formando parte de la junta directiva. No quieren que entre ningún grupo inversor que no cuente con ellos.
¿Cuál es la situación actual en el proyecto de venta del club?
Hay un bloque por parte de los actuales directivos del club. No quieren retirarse, no permiten dejar entrar un proyecto sólido, solvente y con garantías de crecimiento para la Sociedad Deportiva Compostela.
¿Fue el mismo caso que el de Jota?
Cuando se llevó a cabo la negociación con Jota Peleteiro estaba todo acordado, nos habíamos reunido infinidad de veces. El acuerdo llegó a estar muy avanzado. De hecho, los abogados ya habían elaborado los documentos para firmar. Jota ya tenía al entrenador del primer equipo apalabrado. También al que iba a ser director general y a la persona responsable de la sección de marketing, que ya había propuesto cambios en la tienda y demás. Habían tenido conversaciones con personal del club para conocer el funcionamiento. En la última reunión, Jota dijo que le agradecería a los directivos que le ayudasen a arrancar el proyecto y que si querían acompañarlo en la primera temporada sería estupendo.
¿Cuál fue el problema?
En el momento en el que Jota anunció que nombraría a su directiva, los actuales directivos se negaron. Dijeron que ellos se quedaban. Jota lo que les ofrecía era seguir vinculados al club como colaboradores o asesores para ayudar a encauzar el proyecto, para explicar cómo funcionaba el club hasta entonces para que él pudiese tomar las mejores decisiones posibles para el bien del Compostela. De hecho, ya tenía acuerdos verbales con varios jugadores, con el director deportivo Manuel Castiñeiras, con el que iba a ser entrenador para esta temporada... La directiva dijo que no y la propuesta se vino abajo.
¿Y el segundo proyecto?
Como decía, un grupo de empresarios, además de dos futbolistas profesionales que están compitiendo en Primera División y un agente de jugadores que tiene futbolistas en la élite tanto en la Primera División española como en el extranjero, se interesaron por el club. Hablaron conmigo, me presentaron la propuesta y surgieron reuniones, también con varios miembros de la junta directiva actual, incluido el presidente. Era un proyecto de continuidad en el que se mantendrían los convenios de fútbol base con los clubes de la zona, pero con la idea de llevar al Compos más arriba. Todo fue avanzando estupendamente bien y en la última reunión con el presidente actual, Carlos Gesto, yo no estuve presente a petición del propio presidente. El grupo inversor explicó al presidente que renovarían la directiva, que no seguirían los actuales y volvió a truncarse todo.
¿Cómo pueden avanzar tanto unas negociaciones y romperse de la misma forma que con la anterior propuesta?
Este último grupo explicó su proyecto, lo analizamos y valoramos. Pasamos toda la información y, una vez se le presentó al resto de la directiva, lo vieron con buena cara. Han tenido reuniones con algunos de los directivos de forma privada porque no querían que yo estuviese presente. Dijeron que sí en un principio y, en la última reunión, hace dos semanas, explicaron que entrarían con su propia junta directiva y un director general que viene del fútbol profesional a hacerse cargo del club porque ellos son empresarios y futbolistas que no pueden estar aquí en el día a día. Si vienen a hacer una inversión, lo lógico es que sean ellos los que pongan las condiciones y a las personas de su confianza en la junta directiva. Dijeron que no contarían con ningún directivo pero sí con el personal del club.
¿Cómo se va todo al garete?
El martes de la semana pasada, Gesto llamó a uno de los inversores y le dijo que, definitivamente, no iban a ceder la directiva, que no les interesaba ningún proyecto en el que ellos quedasen fuera de la junta.
¿Le consta la existencia de alguna otra propuesta?
Tengo entendido que tenían una propuesta de Agrasar, Borja Iglesias y Granero y que esa gente no les exigía marcharse de la directiva y que seguirían gestionando el club. No toman como válida ninguna opción que implique su salida del club. Solo tienen el afán de seguir en la directiva aunque eso signifique desaprovechar otro gran proyecto de empresarios gallegos y futbolistas profesionales gallegos con la intención de hacer crecer el club. Lo que están haciendo es entorpecer todas estas propuestas y los aficionados deberían darse cuenta de ello.
¿Cuál es su postura sobre esa teórica opción de Agrasar, Borja y Granero?
Con el primero que tendrían que hablar sería conmigo porque soy el máximo acreedor del club y no se lo voy a ceder a alguien que no haya negociado conmigo por mucho que lleguen a un acuerdo con la directiva actual. Después del de Jota, he cerrado un segundo acuerdo que voy a defender y si ellos no me lo permiten, si no se retiran de la directiva, tendremos que acabar en los tribunales. No puedo ni debo seguir aguantando, bajando las orejas y perdiendo el respeto social de la afición cuando hay proyecto con mucha solvencia, con gente del fútbol profesional y empresarial con un poderío económico capaz de llevar al club a categorías superiores.
Ha hablado de llegar a los tribunales.
Si no renuncian a formar parte de la junta directiva e impiden que siga su curso este proyecto que tengo presentado y acordado tendremos que ir a los tribunales. Reclamaré el retiro de la marca y el dinero que he puesto entre los años 2011 y 2016 para cubrir las deudas que había atrasadas y para llevar a cabo todas estas temporadas que no éramos capaces de cubrir económicamente solo con la captación de recursos. Yo era el presidente y tenía que responder si no se llegaba. Lo he hecho siempre y ahora me toca defender mis intereses y los del club.
¿Qué es lo que más le duele de toda esta situación?
Llegué cuando el club se llamaba Campus Stellae, he recuperado la deuda, he hecho frente a las deudas, he soportado todos los presupuestos de las últimas temporadas incluso con aportaciones desde mi cuenta personal para poder cubrirlos. Ahora hay una directiva que bloquea a una ciudad y a un club al que se le han presentado proyectos interesantes de futuro a todos los niveles.
¿Qué ambiente se respira en la ciudad?
Me mantengo al margen pero varios aficionados me muestran su apoyo y me explican su parecer. Están muy enfadados porque saben que es un bloqueo que está afectando al club. No lo ven con buenos ojos y así lo han transmitido.
¿Le ha llegado alguna información a nivel de instituciones?
No creo que a la Federación Gallega ni a la Federación Española les esté gustando está situación porque el Compostela es un club histórico que lleva once años en una muy buena línea deportiva y de gestión.
¿Va a ver el Compos?
No voy a todos los partidos de fuera, pero siempre voy a los de casa. Eso no lo pierdo.
¿Qué intuye que va a pasar en las próximas semanas?
Si no me llaman para decirme que van a dar vía libre, yo no voy a ceder en la titularidad de las marcas para que ellos negocien. Si no me dan vía libre, tristemente tendré que llevarlos a los tribunales.
Toda esta tensión en los despachos podría afectar al club a nivel deportivo.
Espero que esto no afecte en lo deportivo ni al cuerpo técnico ni a los jugadores porque lo están haciendo estupendamente bien. Espero que tengan la madurez suficientemente para aislarse porque esto es por el bien del club. Espero que sigan dando alegrías a la afición y demostrando lo profesionales que son. No tiene que entorpecer para nada la marcha deportiva del primer equipo ni el fútbol base.
La última opción que le ha llegado a Antonio Quinteiro sería para entrar de inmediato en el club pero, una vez más, la actual junta directiva se niega.
¿La segunda propuesta de la que habla sería para entrar de inmediato en el club?
Y tanto. Les han dicho que tienen a seis futbolistas con pasado en Primera División y que siguen en activo que ficharían por el Compos en el mercado de invierno para reforzar la plantilla y tratar de ascender esta temporada a Primera Federación. Esta directiva no tienen ningún tipo de afán de favorecer el crecimiento del club sino todo lo contrario: entorpecer y seguir sentados en su butaca.
¿La postura de la junta directiva es unánime?
No. Sé que hay algunos directivos que están de acuerdo con este proyecto porque quieren que el Compos mejore, pero el interés de otros es seguir ahí a cualquier precio. Quieren figurar y no se dan por vencidos en la negociación que quiere Antonio Quinteiro. Yo pienso única y exclusivamente en el club. Soy el único dueño de la marca y el único acreedor del club, he dado mi palabra a otro grupo inversor y por segunda vez me la van a echar para atrás. Les he dado la condición de socios sin realizar ningún tipo de inversión a personas que consideraba amigas y que ahora forman la junta directiva del club y ahora me bloquean a mí y bloquean al club.