Javi Vega (Madrid, 5 de enero de 1988) cumple su tercera temporada en el Leyma Basquet Coruña. El capitán de la plantilla se ha reencontrado con el entrenador con que subió a la ACB en la temporada 2016/2017 cuando militaba en el Burgos. Ascenso, una palabra casi tabú en el vestuario naranja, que Javi prefiere sustituir por “ilusión”.
¿Cómo está el equipo?
Muy bien. Este año la dimámica está siendo muy buena, y con victorias siempre es más fácil trabajar.
Al Leyma le ha tocado preparar el partido del lunes contra el Albacete en la Poli 2, por estar ocupado el Palacio. ¿Os trastoca en algo los planes?
Sí. No estar en tu casa, en tu pabellón de siempre trastoca, pero es lo que hay. Esto pasa, incluso en la ACB. Son pequeños obstáculos, pero no debería ser excusa.
Salisteis reforzados de la pasada jornada, aunque imagino que ascenso es una palabra de la que no habláis.
No. Hay la ilusión porque sabemos que tenemos nuestras opciones, pero las tienen todos los equipos. Sabemos que, por ejemplo, Burgos, Andorra o Estudiantes en teoría parten con esa presión de ascender, y nosotros vamos paso a paso; primero, tenemos que asegurar el factor cancha. Veremos con quién nos cruzamos, prepararemos el playoff y todavía queda por saber dónde será la Final Four y demás. Paso paso, porque si no podemos quedar en el camino.
La tercera plaza la tenéis muy bien encarrilada. ¿Hay mucha diferencia entre acabar ahí o algún puesto más abajo?
Este año el factor cancha es importante. Quedar tercero o cuarto lo único que te cambia es el cruce, aunque lo cierto es que en la Final Four te condiciona la posible semifinal. Evidentemente, en teoría cuanto más arriba acabes, mejor, pero está la liga muy loca y no sabes con quién te puedes cruzar. Todo el mundo quiere evitar a Burgos.
Lo importante es que somos un grupo, creo que se ve incluso desde fuera
¿Se contempla la opción de ‘biscotto’ en la última jornada, con el fin de elegir el cruce?
No. De hecho, Epi ha dicho que no, y por mi parte, tampoco. Yo quiero ganar en Burgos (ríe). No soy partidario de hacerlo; más que nada porque luego pierdes y se queda cara de tonto. Si quieres subir, te va a tocar ganar, seguro, a uno o dos de los mejores.
¿Consideras que habéis tocado techo, o todavía hay cosas por mejorar?
Siempre hay cosas que mejorar, aunque sea simplemente la constancia. Hay momentos en los que jugamos muy bien, que somos un rodillo, y se pueden mejorar esas sensaciones, que sean más constantes, y minimizar defectos.
¿Algún aspecto concreto del juego?
Las pérdidas es uno de ellos. Y seguir incidiendo en el rebote, además de detalles tácticos para que sea todo lo más compacto posible el equipo y funcione todo mejor.
Siempre hay cosas que mejorar, aunque sea simplemente la constancia
¿Cómo se puede explicar que seáis el equipo que más balones roba y el que más balones pierde?
Jugamos a muchas posesiones y ello te da más opciones de poder robar, pero también de poder perder balones. Son curiosidades. Porque también somos el equipo más anotador. En defensa no estamos tan bien, pero va de la mano de jugar a tantas posesiones. Son aspectos que no se pueden analizar por separado.
Empezasteis la temporada tirando –y fallando– muchos triples. ¿Llegasteis a plantearos si era un camino erróneo?
No, no. Lo que pasa es que el equipo era prácticamente nuevo, y también el entrenador, que es muy importante. Y hay que adaptarse a los sistemas y encontrar cada uno su rol. Además tuvimos mala suerte o no supimos cerrar algunos partidos al principio y se nos escaparon unas cuantas victorias. Castelló fue el punto de inflexión. Salvo en casa contra el Gipuzkoa, que fue un partido raro, y en Oviedo, en todos los demás hemos competido.
Sé lo que Epi quiere de mí y él sabe qué puedo aportar. Son ya cinco años juntos
Entrenador nuevo, que para ti no lo es. ¿Qué sentiste al conocer su fichaje?
Tranquilidad. Nos conocemos mucho. Son ya cinco años con él. Yo sé lo que él va a querer de mí, él sabe lo que yo puedo aportar, y parto con esa ventaja. Y a la hora de trabajar puedo ayudar mucho a los compañeros. Nos reímos muchas veces porque cuando Epi mete cosas ya me sé los dos pasos siguientes (risas).
¿Ves muchas diferencias entre aquel Burgos y este Leyma?
Allí dependíamos mucho de Goran Huskic, un ‘5’ que pasaba muy bien, tipo Jokic, y aquí es diferente. Las similitudes pasan porque somos un grupo como aquel, en el que no hay un MVP de la liga, sino una base sólida de jugadores de los cuales cada día puede destacar uno y afrontamos los partidos como equipo. No estamos ninguno en el top-25 de valoración de la liga y entre el 30 y el 60 estanos seis o siete. Esto habla muy bien de nosotros.
Tres temporadas aquí. ¿Se acostumbra uno a tanto compañero nuevo cada verano?
Cuesta, pero ver caras nuevas es ilusionante. Es el baloncesto actual, y más en LEB Oro. Por el tema fiscal te sale mejor fichar a uno que renovarlo. Mantener el bloque te da un plus, claro, pero es el baloncesto de hoy. Lo importante es que somos un grupo, creo que se ve incluso desde fuera. Todos estamos muy a gusto con nuestros roles y la dinámica es buenísima.
No voy a elegir rival, porque si eligiera uno y luego va y nos pinta la cara...
A nivel particular, ¿en que rol estás más cómodo?
Va dependiendo del rival y también de los sistemas que juguemos para cada partido. De ‘3’ grande no tengo problema, pero prefiero de ‘4’ abierto.
Igual ya no apetece tanto pegarse dentro...
Sí, sí, pegarse sí. Casi es peor correr de un lado a otro (ríe).
Un baloncesto de contacto es el 3x3, que Javi, internacional con España, no aparca de momento: “Seguiré. Me lo tomo como un entreno, pero en serio, porque compito, me viene bien en verano y vamos rotando, así que tampoco es una paliza física que me vaya a condicionar durante el año”, razona el madrileño.
Pasaste varios años en ACB. ¿Se acerca a ella la LEB Oro de esta temporada?
Hay mucha distancia, aunque es cierto que está LEB Oro está más fuerte que otros años. Es la más dura. Se está viendo que los jugadores que llegan a ACB desde Oro, igual no el primer año, pero en dos o tres dan más nivel.
Este nivel, ¿le da más valor a lo que estáis haciendo?
Evidentemente. Si subes cargándote a un Palencia o a un Burgos o a un Estudiantes tiene más mérito que una LEB algo más descafeinada.
Si quieres subir te va a tocar ganar, seguro, a uno o dos de los mejores
¿Ves a algún equipo por encima de los demás?
Hasta hace poco, Andorra. Burgos tiene potencial para ser mejor que Andorra, lo que pasa es que a nivel colectivo han demostrado tener muchas debilidades. Por eso, el mayor miedo que tengo de cara a los playoffs es Burgos, porque al 90% puede ganar bien a todos los equipos.
Mahalbasic es el presupuesto de todo nuestro juego interior, o incluso más, y Kyrie Thomas es el presupuesto de todo nuestro juego exterior. Norelia, hace dos años, MVP de la liga. Echeonyia subió con el Betis siendo importante. Carlos Suárez, en ACB hasta hace dos años. Un plantillón. Y parece que por fin se han puesto las pilas.
¿Qué formato de playoffs te gusta más, el tradicional, o el de esta temporada, con cuartos de final a cinco partidos y Final Four?
Me gusta más el formato de siempre. También porque le das la opción a tu afición del factor cancha y a vivir unas posibles finales y que tu gente tenga peso. Es cierto que también me gusta la Final Four, tipo Copa del Rey, que junta a las aficiones y puede ser muy bonito, pero a efectos de juego es una moneda al aire cuando te estás jugando la temporada. Creo que el formato tradicional sería más justo y el de este año es más espectacular.
Se habla de A Coruña como posible sede.
Sí, seguro que lo van a intentar. Por lo que me dijo Roberto (Cibeira, presidente del club) lo van a mirar. No tienen que hipotecar el club, ni hacer un derroche, pero por lo menos valorar la opción de organizarlo.
Si Burgos, que mete 9.000 personas en el Coliseo, se presenta, o Estudiantes, con el WiZink –que no sé si estará disponible–, es muy difícil competir con eso. Está Movistar detrás, se la deben del año pasado y Madrid es céntrica para movilizar a la gente. Todo suma. No sé cuál será el baremo. Nosotros tenemos que meternos en la Final Four y luego plantearse luchar por por organizarla.
Si pudieras elegir un rival para cuartos...
No voy a elegir ninguno, porque si, eligiera uno y luego va y nos pinta la cara... Burgos, como ya te he dicho, tiene la mejor plantilla. Gipuzkoa tiene una plantilla corta, pero ya nos ganó aquí. Alicante es un equipo muy bien construido. Valladolid tiene menos talento que el resto pero es el más físico de todos. Lleida, sin Carrera, está demostrando ser un buen grupo y sigue ahí. Y Estudiantes es de los que opta a subir. Tal vez Castelló, pero viene en dinámica ganadora.
Sería muy bonito vivir dos ascensos este año. Al Depor ya le toca
Una cuestión fuera del baloncesto, que sé que eres muy futbolero. ¿Subirá por fin el Depor?
Ya toca. En casa está de diez. A ver si rasca más puntos fuera de los que está rascando. Y sea ascenso directo o no, a ver si hay suerte. La ciudad es de fútbol, la ciudad es del Depor. Fuimos a verlo contra el Celta B y había 25.000 personas. Es una locura.
Sería muy bonito dos ascensos este año. Creo que hay hueco para varios deportes. Aquí gusta mucho el baloncesto, pero a lo mejor falta ese sentimiento de pertenencia con el club. Si subiésemos, creo que la afición se multiplicaría por dos o por tres. Creo que habría una oleada de gente enganchada, como pasó en Burgos.
Con 35 años en el DNI, Javi exhibe una excelente condición física, por ello se plantea seguir jugando. “Te diría que dos o tres años más, hasta que acabe de pagar la hipoteca (risas). O hasta que el cuerpo aguante”. Y no duda a la hora de responder si le gustaría acabar su carrera vestido de naranja: “Por supuesto. Estoy muy a gusto en este club, con este proyecto, y en esta ciudad”.
