Una enfermedad es la causa de que Paula Otero renunciase, el sábado, a su segundo día de competición en la Copa del Mundo FINA de Berlín, un contratiempo que también le impidió saltar ayer a la piscina para nadar la prueba de los 800 metros libre.
La coruñesa del CN Arteixo, séptima clasificada en los Europeos de este verano en Roma en la segunda prueba más larga del programa, comenzó su andadura en Berlín el viernes, día en que participó en dos pruebas, separadas por escasísimo tiempo.
Una falta de descanso que se postula como una de las causas –las otras podrían ser el principio de la enfermedad y que su fuerte es más la piscina larga que la corta– del bajo rendimiento: 34ª de 48 participantes en el 400 libre y 25ª de 30 en 200 mariposa, prueba essta que ha incorporado a su programa de trabajo para intentar mejorar la velocidad.
La próxima cita para la joven nadadora herculina será el el Campeonato del Mundo en piscina de 25 metros, que tendrá lugar del 13 al 18 de diciembre en Melbourne (Australia).
