El Ural encajó una dolorosa derrota contra el Roces gijonés. Dolorosa porque la expulsión de dos jugadores y otras dos lesiones marcaron un día para olvidar en el bando verde.
En una primera mitad igualada, el Roces se adelantó cuando los locales contaban con un jugador menos sobre el terreno de juego porque el delantero Sergio se encontraba fuera del campo atendido por las asistencias. En esa tesitura marcó el Roces con un tanto de Carlos a balón parado.
El Ural se sobrepuso al golpe, pero encajó uno poco después con un penalti que detuvo Pablo Pose. El árbitro se cebó con el equipo coruñés al señalar una nueva pena máxima muy discutida por una falta de Iago Romar que los locales interpretan que fue fuera del área. Diego transformó desde los once metros y, además, Iago fue expulsado.
La expulsión de Viqueira y el tanto de Álvaro cerraron un partido nefasto para el Ural, que pasa página y ya piensa en el derbi coruñés del próximo sábado ante el Depor.