El RC Deportivo disputó su primer encuentro de la temporada 22-23 en el estadio de Riazor, en una cita ante el Linense en la que formaron de inicio tres ‘caras nuevas’ respecto al pasado ejercicio: Raúl García Carnero, Víctor Narro y Gorka Santamaría.
El segundo de ellos, que el pasado año militó en el Valladolid Promesas, dejó muy buenas sensaciones en el costado de ataque izquierdo.
El ‘14’ protagonizó los mejores acercamientos en la primera parte, siendo de lo más destacado en un Deportivo gris en el plano global.
Narro lo intentó una y otra vez, exhibiendo velocidad, precisión en la conducción y desborde. Sin embargo, no tuvo ocasión de probar suerte en el remate ante Varo.
Raúl Carnero, por su parte, cumplió en defensa e intentó sorprender al meta rival desde la distancia, con dos potentes zurdazos; el primero de ellos obligó al arquero visitante a una espectacular estirada.
Sin pegada
Sin duda el que menos protagonismo tuvo en la tarde-noche de ayer fue el delantero centro Gorka Santamaría, que derrochó ganas y empuje sin pegada.
No en vano, apenas entró en juego y, de hecho, no pudo rubricar ni un solo remate a puerta. Fue relevado por Rubén Díez en el minuto 68.
En los compases finales del encuentro, para enfriar el mismo, saltaron al campo tres nuevas incorporaciones: Rubén Díez, Ibai Gómez e Isi Gómez.
El primero de ellos rozó la diana en un remate que se enganchó en su propia mano. Ibai e Isi apenas dispusieron de tiempo suficiente para entrar en acción.
