El extremo Víctor Narro se unió ayer a la lista de bajas en el entrenamiento matinal del RC Deportivo debido una gastroenteritis que le obligó a quedarse en su domicilio.
El exjugador del Valladolid B no pudo tomar parte en un ensayo en el que también estuvieron al margen, con sendos planes personalizados de trabajo, los ‘tocados’ Héctor Hernández, Raúl García Carnero, Ibai Gómez y Diego Villares.
Los tres primeros saltaron al césped de la Ciudad Deportiva de Abegondo para llevar a cabo labores de carrera continua y diferentes ejercicios para acelerar sus respectivas recuperaciones.
Villares, aquejado de unas molestias en la rodilla, se empleó en solitario en las instalaciones del gimnasio.
Los que han dado un paso adelante en su puesta a punto, dejando atrás sus dolencias, han sido el centrocampista Roberto Olabe y el joven extremo David Mella, que completaron prácticamente todo el entrenamiento.
Mella, Yeremay, Jairo y Dani Barcia, con Tim Caroutas en alguna tarea, fueron los representantes de la cantera blanquiazul en el test matinal de ayer por la mañana, de aproximadamente una hora y media de duración, bajo un calor por momentos asfixiante.
El plantel blanquiazul piensa ya en el próximo compromiso amistoso del sábado a las 20.30 horas en Riazor ante el Metalist ucraniano, en choque correspondiente a la LXXVII edición del Trofeo Teresa Herrera.
A falta de poco más de dos semanas para el inicio de la competición liguera, el RC Deportivo intenta afinar al máximo su puesta a puesta a punto en pretemporada.
El cuerpo técnico de Borja Jiménez hizo mucho hincapié en repasar automatismos tácticos, incidiendo en los aspectos defensivos grupales, así como también en las transiciones defensivas y en un ejercicio específico para los finalizadores del equipo.
Un partido de ocho contra ocho en espacios reducidos también formó parte del ‘planning’ del día en la Ciudad Deportiva de Abegondo.
