¿Aún es posible el ascenso directo del Deportivo? A cuatro puntos del Alcorcón, al que recibirá el sábado en Riazor, las opciones de los blanquiazules se han reducido. Los blanquiazules tienen que ganar sí o sí ese partido con los alfareros y luego esperar más tropiezos de sus rivales en el tramo decisivo de la temporada, que afrontarán, además, sin su máximo goleador, Alberto Quiles.
Este diario pulsó la opinión de sus seguidores en la red social Instagram y fueron muchos los que se animaron a dar su visión sobre si ven factible el ascenso directo, objetivo con el que afrontaban la temporada.
"Sí matemáticamente, pero siendo realistas, NO", publicó uno de los usuarios. Es una opinión que comparten la mayoría de instagramers que siguen la cuenta de este diario.
Las cuentas todavía dan, pero pasan por un pleno de triunfos y esperar lo que hagan los demás. Y el Deportivo tampoco transmite confianza. "Matemáticamente sí, pero por las sensaciones que deja el equipo… Muy difícil", publica otro lector.
Algunos mantienen la esperanza de conseguir acabar como campeón del Grupo I de Primera Federación.
"Es complicado, pero no imposible", defienden los internautas. "Es complicadísimo", aporta otro, consciente de que cada dos semanas el deportivismo se mueve en una montaña rusa de resultados y de emociones. "Llevamos ya varias semanas sobre esto y cada 15 día volvemos a la realidad", precisan.
Los hay que miran al banquillo, a Óscar Cano, que ha consolidado al Deportivo en las posiciones de playoff pero, como Borja Jiménez, ha sido incapaz de llevarlo a la primera plaza del grupo en toda la temporada.
"Con Cano, no", escribe uno; "no, pero por culpa del entrenador", afirma otro; "mientras esté Cano, ni directo ni de ninguna forma", sostiene uno aun más crítico. "Matemáticamente y quizá futbolísticamente, pero con Cano en el banquillo no", sentencia otro.
Y no solo se mira al banquillo. Algunos apuntan más arriba y señalan a la dirección deportiva y el Consejo de Administración del Deportivo como responsables de la situación actual.
Principalmente, el problema está en la trayectoria del equipo fuera de casa. En Riazor el equipo es solvente, fuerte, pero a domicilio baja muchos enteros. Ha enlazado cinco jornadas sin ganar y solo ha ganado un partido a domicilio en 2023. Lamentable.
"Sin ganar fuera de casa, imposible", asegura un seguidor de este diario. "Posibilidades hay, lo malo son las malas sensaciones que deja el Depor fuera de casa", dice otro.
Hay formas diferentes para expresar la misma idea, la de que el Deportivo no logrará el ascenso directo: "Ni de coña"; "ni de palo, neno"; "salvo milagro, no"...
Además. el equipo ha fallado cuando ha estado cerca de asaltar el liderato. Eso reduce sus opciones y la fe de los aficionados. "Salvo milagro, no"; "lo dudo, cada vez que lo tienen a tiro se alejan", justifican.
También miran a los árbitros, sobre todo después de que la entrada del lateral del Córdoba Ekaitz Jiménez a Quiles no fuera sancionada con la tarjeta roja: "Con el cuadro de árbitros que nos toca… mal lo veo", dice uno.
La baja de Quiles en la recta final de la temporada es otro hándicap para el Depor. "Después de lo de Quiles, el equipo tiene que ganar todo, además de que tiene que pinchar el Alcorcón...", recuerdan.
El Deportivo tendrá que demostrar en el césped en las cuatro últimas citas del curso si realmente hay opciones de acabar en la primera posición y lograr así el billete directo a Segunda División o si hay que pasar por un playoff, como la temporada pasada, aunque con el deseo de que el final sea diferente.
