El Deportivo tira de recursos a la espera de que le lleguen las piezas que faltan en demarcaciones como la medular, donde aguarda por Mfulu. Este miércoles Imanol Idiakez ubicó en el centro del campo, junto a Diego Villares, a Petxarroman, en el empate ante el Gil Vicente. 

El ex del Andorra, que había salido desde el banquillo ante el Famalicão, disfrutando como lateral diestro su primera media hora de juego con los blanquiazules, cumplió ayer en el medio campo.

Y lo hizo ayudando tanto en la construcción como en la destrucción del juego. En la creación, colocándose entre centrales, facilitando en la salida de balón. Conduciendo y sirviendo juego, con cambios de orientación y pases precisos.

Y, cuando perdía el esférico, por un fallo suyo o de un compañero, no le dolían prendas ni escatimaba en esfuerzos para tratar de recuperar la pelota.

Toda una parte para Petxarroman, que ya había experimentado buenas sensaciones el martes en el primer amistoso, y que dejaba su sitio a José Ángel, ya jugador específico para el centro del campo.
No obstante, no terminaba el partido el andaluz, debido a un golpe, y le daba el relevo Rubén López, titular en el primer duelo de la gira lusa.

Un defensa cumpliendo en el centro del campo, una circunstancia que no es extraña en el Deportivo, que sabe darle una vuelta de tuerca y buscar la polivalencia de sus jugadores.

Comodín para Idiakez

La encontró el curso pasado con Jaime Sánchez, reconvertido en centrocampista cuando había déficit de efectivos en el timón de mando del Dépor. Cumplía con creces el de Chiclana en esa posición, que no era la suya y era alabado por el propio Imanol Idiakez. 

Pero no era la única vez que jugaba lejos de su puesto natural, pues también llegaba a actuar como lateral derecho.

Siguiendo con esa versatilidad de los blanquiazules, volvió a jugar Kevin Sánchez, escorado a la banda derecha, aunque su posición más afinada sea la de delantero. 

Ya había tenido sendas buenas actuaciones contra el Ourense, sirviendo una asistencia y con el Pontevedra, y ayer también dejó buen sabor de boca. 

El canterano es uno de los futbolistas que está participando en la pretemporada con el primer equipo y el burgalés quiere convencer a Idiakez de su valía.

Un camino que ya inició el curso pasado Rubén López que, aunque con ficha del Fabril, fue sumándose a la disciplina del Dépor para acabar teniendo minutos e incluso marcando, como contra el Celta Fortuna, en la importante victoria en Balaídos. 

Y completando con los canteranos, era titular Pablo García. El lateral derecho, en edad juvenil, destacaba de nuevo, aunque a veces se complicaba en jugadas aparentemente sencillas.
Como sencillo no le ha sido a Idiakez suplir los problemas que se ha encontrado ante el déficit de efectivos en algunas demarcaciones.

Se estrujó el cerebro en varias ocasiones el míster vasco la campaña anterior, haciendo encaje de bolillos y aprovechándose de jugadores comodín. Una versatilidad que ahora prolonga en el tiempo Petxarroman, desde el lateral, saltando a la medular.