Las dos caras del Deportivo, lejos de casa y el Abanca Riazor, han sido una constante esta temporada. Difícil de explicar la forma tan diferente en la que carbura el equipo de Borja Jiménez a domicilio, donde ganó por última vez el pasado 26 de enero, ante el Zamora
(0-1). Desde entonces, seis jornadas sin ser capaz de sumar de tres, en las que sufrió tres derrotas y el mismo número de empates.
Más de tres meses sin ganar como visitante, que unidos a la ‘pájara’ con la que el equipo empezó febrero, con tres derrotas seguidas, explican el bajón sufrido por el Depor, que le llevó a acabar cediendo el liderato y decir adiós a las opciones de ascenso directo.
Este sábado, en horario unificado a partir de las 18.30 horas, el club blanquiazul tendrá la última oportunidad, en temporada regular, de llevarse un triunfo en su visita al Valladolid Promesas, al que goleó en la primera vuelta (3-0).
Al igual que le ocurrió la anterior jornada, ante el Tudelano, el Deportivo se enfrentará a un equipo, en este caso, virtualmente descendido, con todo lo que eso supone.
Una escuadra sin nada que perder ya, que jugará sin tensión y como suele ocurrir co los filiales, llena de futbolistas con proyección. No obstante, en los anexos al estadio de Zorrilla, donde compite el conjunto pucelano, este solo ha ganado cinco choques, empatado el mismo número y perdido siete, si bien su último triunfo fue de mérito, ante un CD Badajoz que quiere jugar el playoff de ascenso.
Además, los de Julio Baptista encadenan cuatro jornadas en su cancha invictos, con tres victorias y un empate. Después de la trabajada victoria contra el conjunto navarro, con remontada incluida, en el ‘debe’ del Deportivo estaba el volver a ganar lejos de A Coruña. Terminar este tramo final liguero con buenas sensaciones y con el grupo enchufado y ganando es uno de los objetivos del cuerpo técnico.
Lejos queda ya aquel final del mes de enero, cuando el Deportivo se imponía por la mínima en el Ruta de la Plata, con una solitaria diana de Quiles en el 90 de partido (0-1).
Después vendría la derrota ante la SD Logroñés, cimentada en un tanto de Soberón en el 64 de la contienda (1-0). Seguirían las malas noticias para el Deportivo lejos del Abanca Riazor, esta vez en forma de tablas sin goles, en un insulso partido ante el San Sebastián de los Reyes (0-0). El siguiente duelo lejos de Riazor supondría el varapalo en el Nuevo Vivero, ante el CD Badajoz, con el que los coruñeses perdían 3-0 y ahondaban en su crisis de juego y resultados.
Pero, la decepción más fuerte de la temporada llegaría en Balaídos, con un 2-1 en contra, en un choque en el que los herculinos acabarían con uno menos, debido a la expulsión de Alberto Quiles, autor del único gol coruñés, de penalti.
Después vendría el empate contra el Bilbao Athletic (1-1). Quiles adelantaba al Deportivo, pero Malcom rescataba un punto, en un partido señalado posteriormente por supuesta alineación indebida de los vascos. Una cuestión a la que Competición y Apelación han quitado la razón al Deportivo, que ha recurrido al TAD (Tribunal Administrativo del Deporte). El último choque lejos de la ciudad coruñesa fue contra el Talavera de la Reina, ahora entrenado por el exblanquiazul Manuel Mosquera, que quiere evitar el descenso a Segunda RFEF. Una contienda que se zanjó con 1-1, con goles de Monroy y Quiles. Escaso bagaje anotador de los blanquiazules en estas últimas seis jornadas como visitante, con solo tres dianas y el propósito de darle la vuelta a la dinámica ante un Promesas en horas bajas en la clasificación, pero que ha dado un paso adelante en sus últimos partidos en los anexos.
Enfrente un Deportivo que quiere ir a por le reválida en este final de temporada lejos de Riazor.
Los herculinos, dos traspiés y tres tablas en su campo |
Muy pocas veces se han escapado puntos de Riazor en esta temporada, demostrando que el campo blanquiazul es una plaza complicada para torear y una presumible buena sede de playoff para un Deportivo que gana enteros y se crece ante su inconmensurable hinchada. Solo han perdido los pupilos de Borja Jiménez dos veces en su cancha: en la jornada 22 ante el Real Unión de Irún (2-1) y en la 21, aplazada por el supuesto brote de coronavirus del Racing de Santander, que se llevó algo más que tres puntos, también mucha moral, tras su ‘estocada’ a los coruñeses (0-1). Tres equipos fueron capaces de arañar un punto de A Coruña, dos con idéntico marcador (1-1), la SD Logroñés y el Bilbao Athletic y Racing de Ferrol (0-0). Ninguno más ha conseguido ‘sacar petróleo’ del Abanca Riazor, de donde se marcharon goleados el Celta B (5-0), Valladolid Promesas, DUX, UD Logroñés, todos ellos por 3-0 y más recientemente el Tudelano (4-3). Un campo prácticamente infalible en el que los herculinos muestran su cara más letal y despliegan sus mejores artes. |