La eliminatoria estaba resuelta con el 0-6 de la ida, por lo que solo había que dejar los 90 minutos de Riazor para confirmar la presencia del Deportivo en la final a cuatro de la Copa de Campeones. Así fue, y además, con una nueva victoria (2-1) ante un Tenerife que esta vez compitió mejor. Los goleadores, Rubén Fernández y José Rey, se llevan su primer gran recuerdo del templo blanquiazul, y junto al resto del equipo ya esperan al rival de semifinales: Valencia, Real Madrid o Betis.

Miguel Figueira optó por realizar tres cambios con respecto a la ida en tierras canarias. Rotó en la portería, donde apareció Anxo en lugar de Álex; Vergara sustituyó a Samu en el centro de la zaga; y Dipanda tuvo su oportunidad en el extremo derecho en detrimento de un Álvaro Fraga que ayer disputó unos minutos con el Fabril. Eso sí, el centrocampista formó parte de un banquillo con once jugadores. Nadie se quería perder el premio de estar en Riazor. Enfrente, un Tenerife ordenado en un 4-4-2.

El Tenerife salió con ganas de limpiar su imagen tras el abultadísimo resultado de la ida y sorprendió al Dépor con cinco minutos de dominio en los que una buena jugada de Montero terminó con un tiro muy desviado de Joel en el área, y con un intento de Juliano desde la frontal.

Superado ese tramo, el conjunto coruñés se hizo con la manija y empezó a llamar a la puerta del gol. La primera fue para Dipanda, que superó con una facilidad pasmosa a su par con una larga carrera por banda derecha, pero terminó definiendo mal tras ser defectuoso su toque previo al tiro. Poco después, centro de Mario desde banda derecha, toque de Lucas y remate alto de Rubén.

Eran las primeras llegadas y antes del minuto 10 llegaría la primera parada de Sosa, a tiro de un José Rey que empezó por dentro, pero no tardó en caer a su posición habitual por banda derecha. Cuando eso sucedió, quien centró su posición fue Héctor Areosa. Dicha acción terminó en córner y en él marcó Mario Hermo de cabeza. La acción, sin embargo, fue anulada por falta de un compañero.

Quiso mantener el Deportivo la presión alta, pero el Tenerife comenzó a leer mejor los ataques y hasta la media hora los locales solo pudieron inquietar a Sosa con un chut de Nico al que le faltó algo de potencia.

Aunque no era capaz el equipo local de dar velocidad a sus pases, se pudo ir al descanso en ventaja tras un centro desde banda izquierdo que Lucas, sin oposición en el área, mandó fuera por poco.

Regreso con gol

La espesura que mostró el Dépor durante el segundo tramo de la primera mitad tornó en claridad en el primer minuto tras el entretiempo. No se lo pensó dos veces Lucas para sacar un envío medido al área que remató Héctor. El portero Sosa evitó el gol en primera instancia, pero nada pudo hacer ante Rubén, que estaba en el sitio en el que siempre debe estar el '9' para empujarla.

El gol dio alas al equipo de Miguel Figueira, que en los minutos posteriores generó a través de un potente lanzamiento de Héctor Areosa y de una combinación entre Dipanda y Lucas que estaba invalidada por fuera de juego. 

Tras ello, carrusel de cambios, para que los máximos jugadores posibles disfrutaran del encuentro, y el segundo tanto, que llegó a través de una rápida salida a la contra. El Dépor fue ganando metros con pases rápidos y, en situación de dos contra uno, Lucas habilitó a José Rey para que este no perdonara en el mano a mano con Sosa, al que batió cruzando el balón.

Ese gran cuarto de hora dio paso a minutos más planos, en los que el equipo coruñés lo siguió intentando con disparos desde fuera del área. Se le marcharon fuera a Héctor y Nico obligó a hacer una gran parada a Sosa. Para terminar, el Tenerife hizo el gol del honor con un buen remate con giro del recién incorporado Samuel a la salida de un córner.