Los tres enfrentamientos que ha protagonizado el Deportivo desde que selló la permanencia en Segunda frente al Albacete, saldados con derrota, han empañado un poco la temporada blanquiazul. Tras asegurar su continuidad con el 5-1 sobre el cuadro manchego, los coruñeses ocupaban el décimo puesto de la clasificación con 53 puntos, a nueve del playoff de ascenso y con trece sobre el descenso, cuando aún restaban cuatro jornadas por disputarse. Sin embargo, el cero de nueve de sus tres últimos compromisos ha hecho caer cinco plazas al bloque deportivista, que ahora es decimoquinto, a trece del playoff y con ocho sobre el Eldense, cuando resta la última jornada por disputarse. Pese a todo, el Dépor sigue encontrándose entre los mejores de la categoría de plata desde que Óscar Gilsanz tomó las riendas del equipo.

Antes del evidente bajón en el rendimiento de los blanquiazules desde que certificaron su salvación, el bloque coruñés exhibía el sexto mejor registro de Segunda División con el técnico betanceiro en el banquillo. 43 puntos en 26 partidos con Gilsanz habían conquistado los deportivistas, a los que solo superaban el Elche, que había logrado 53 puntos en ese periodo de tiempo, Levante, Almería y Oviedo (los tres con 46 puntos) y el Mirandés (44). Granada y Huesca (ambos con 40) eran los inmediatos perseguidores del Deportivo. Los herculinos ocupaban la teórica última plaza de las cuatro del playoff, desde que el betanceiro subió del Fabril al primer equipo.

El Dépor no ha vuelto a ganar desde su goleada sobre el Albacete del pasado 4 de mayo. De hecho, ha encajado tres derrotas seguidas por primera vez en lo que va de temporada. Anteriormente, la peor racha del curso eran los dos partidos perdidos de forma consecutiva que encajó en tres ocasiones: En las jornadas primera y segunda, ante el Oviedo (0-1) y el Huesca (2-0). En la quinta y la sexta, frente al Córdoba (2-0) y el Burgos (0-2). Y en la undécima y duodécima, contra el Levante (2-1) y el Racing de Santander (1-2).

Precisamente, esas tres series de dos derrotas seguidas se produjeron con Imanol Idiakez en el banquillo. Con el técnico vasco, los blanquiazules registraron dos victorias, cuatro empates y seis derrotas en las doce primeras jornadas. Unos números que les llevaron a ocupar el antepenúltimo puesto, a dos puntos de la permanencia, cuando el club decidió destituir al guipuzcoano.

Desde que el betanceiro tomó las riendas del Dépor, el conjunto coruñés no había sufrido más de una derrota seguida hasta estos tres últimos partidos perdidos de forma consecutiva en las últimas semanas. Pese al bajón desde haber sellado la permanencia, el equipo solo ha caído una plaza en la ‘Liga Gilsanz’. La escuadra herculina ha pasado de ser la sexta mejor tras el 5-1 al Albacete a ser la séptima de la categoría, después de los tropiezos con el Sporting, el Granada y el Zaragoza.

Durante las 29 jornadas que lleva Gilsanz en el banquillo, el mejor equipo sigue siendo el Elche, con 56 puntos, seguido de Levante (55), Oviedo (53), Mirandés (51), Almería (50), Granada (46) y Dépor (43). De esta forma, los herculinos estarían a tres puntos del playoff. Así que, pese a las sombras de las tres últimas citas, el equipo coruñés sigue exhibiendo unos números notables con el preparador betanceiro. Las once victorias convierten a los blanquiazules en el octavo conjunto que más partidos ha ganado de los últimos 29 disputados, con un 38%.

Artillería

El ataque es uno de los aspectos en los que sobresale el equipo de Gilsanz. Con el betanceiro en el banquillo el Deportivo se ha erigido en la tercera escuadra más realizadora de Segunda División. 45 goles ha materializado el bloque coruñés, al que tan solo superan en ataque el Levante, con 50 dianas, y el Almería, que ha firmado 49 tantos en las 29 últimas jornadas.

Las cifras defensivas son algo peores, sin ser tampoco malas. Los 35 goles encajados por el Dépor de Gilsanz le convierten en el undécimo conjunto que menos tantos ha recibido. Se trata de uno de los equipos más equilibrados de Segunda. De hecho, luce el sexto mejor balance goleador de la categoría con 10 tantos más a favor que en contra. En este sentido, el mejor es el Levante con +22, seguido del Elche (+19), el Almería (+16), el Mirandés (+14) y el Oviedo (+12). Mientras que en el lado opuesto se sitúan el Racing de Ferrol, que exhibe un balance goleador de -35 en los 29 últimos encuentros, y el Cartagena, con -33.

Derrotas apretadas

El cuadro coruñés ha soltado el acelerador desde que aseguró su continuidad en Segunda, lo que ha propiciado las tres derrotas seguidas desde que aseguró la permanencia. Aun así, los partidos se decantaron en contra de los blanquiazules por un gol de diferencia.

El Dépor cayó en Gijón frente al Sporting (2-1) en un duelo en el que se vio superado, sobre todo, en la primera parte, aunque mejoró su imagen tras el descanso. Los asturianos efectuaron 17 disparos por nueve de los coruñeses, aunque solo uno entre los tres palos. Ante el Granada en Riazor (2-3), de nuevo los herculinos pagaron su relajación en los primeros minutos.

Mejor imagen ofreció el equipo en La Romareda (1-0), donde, pese a perder con un Zaragoza que se jugaba la permanencia, durante muchos momentos se mostró superior, aunque sin generar peligro. Remató nueve veces durante todo el encuentro, pero solo uno fue a portería.

“No tiene nada que ver con las últimas derrotas. Hoy el equipo salió bien a competir. Puedo estar molesto por el resultado, pero no por la actitud, que fue buena”, dijo Gilsanz tras el duelo en Zaragoza.

Bajas importantes

Desde que el Dépor selló la permanencia, el técnico ha introducido más cambios en el once y ha concedido oportunidades a los menos habituales. El central Jaime ha sido titular en las cuatro últimas citas. En la medular, Genreau, Mfulu y Charlie Patiño han acompañado a Villares en el doble pivote en un partido cada uno, debido a la pubalgia que ha obligado a José Ángel a pasar por el quirófano. En la zona de tres cuartos, Yeremay ha descansado más, mientras Diego Gómez y Cristian Herrera han asumido mayor protagonismo e incluso Adrián Guerrero debutó en Zaragoza y Gauto regresó tras su lesión a principios de marzo. También en punta fue titular Bouldini y Kevin tuvo minutos en el tramo final.

La mayoría de estas rotaciones se han producido por las bajas de jugadores como Mella, José Ángel o las de Barbero y Eddahchouri en el ataque.

El evidente bajón tras atar la salvación no puede esconder el buen rendimiento del Dépor de Gilsanz.