El Talavera, oponente ante el que el Deportivo abrirá el año 2022 el domingo 9 de enero en Riazor, cuenta en sus filas con dos futbolistas que han competido en Primera División.

Uno de ellos es el coruñés y exblanquiazul David Añón. El delantero herculino llegó a disputar tres encuentros en la máxima categoría durante la campaña 2009-10, con la camiseta del Depor.

Añón militaba en el Fabril, pero el técnico blanquiazul por aquel entonces, Miguel Ángel Lotina, le hizo debutar con el primer equipo en Primera División el 28 de febrero de 2010.

El atacante disputó los últimos 8 minutos de la derrota de los coruñeses en casa del Villarreal (1-0).

El joven jugador disputó otros dos encuentros de Liga más. Sumó once minutos frente al Zaragoza en Riazor (0-1) el 1 de mayo; y cuatro días más tarde fue titular contra el Osasuna en Pamplona (3-1).

los que más

Álex sumó 8.995 minutos en 118 partidos y Miku, 8.542 en 124 encuentros 

En total disputó 96 minutos en la categoría de oro. Todos ellos con el Depor. Además, su debut con el cuadro herculino fue unos meses antes, el 20 de enero, en la ida de los cuartos de final de la Copa del Rey, frente al Sevilla en Riazor (0-3).

David Añón, que cumple su segunda temporada en el Talavera, es uno de los jugadores importantes del conjunto manchego. Ha participado en 14 de los 17 partidos de liga de la presente campaña, siendo titular en doce, y ha marcado dos goles.

El equipo que dirige el técnico Víctor Cea cuenta con otro ‘exPrimera’, el portero Rubén Miño. El guardameta catalán, suplente del pontevedrés Edu Sosa esta temporada, llegó a jugar un partido en la máxima categoría durante el curso 2012-13, en las filas del Mallorca.

Miño, que pasó por la cantera del Barcelona, jugó los últimos 28 minutos del duelo entre el Espanyol y el Mallorca en Cornellà-El Prat (3-2) del 18 de enero de 2013 al sustituir al exdeportivista Dudu Aouate por lesión.

Los blanquiazules

Mayor presencia de futbolistas con experiencia en Primera hay en las filas del Deportivo. El conjunto coruñés cuenta con cuatro jugadores que compitieron al más alto nivel.

Los blanquiazules con más protagonismo en la máxima categoría del fútbol español son Álex Bergantiños y Miku.

El capitán jugó en la élite con dos equipos, el Depor y el Xerez. Su debut en Primera se produjo con la escuadra andaluza el 30 de agosto de 2009. El mediocampista había logrado el ascenso a la categoría de oro la campaña anterior con el cuadro xerezano, donde había jugado cedido por el Deportivo, y el club prolongó su préstamo un curso más, lo que permitió a Bergantiños disputar 26 encuentros con el equipo andaluz durante la liga 2009-10.

Los otros 92 duelos que protagonizó en Primera ya fueron con la elástica del Depor.

En total, 118 partidos en la máxima categoría, 99 como titular, cuatro goles y cinco asistencias en 8.995 minutos.

400 minutos menos en la élite (8.542) gozó Miku, quien se estrenó en Primera División con el Valencia durante la temporada 2009-10, aunque ese mismo curso se marchó al Getafe, que también competía en la categoría de oro.

El Rayo Vallecano fue su último destino en el principal escalón. En total, 124 encuentros, 94 titularidades, 37 goles y 12 asistencias.

El tercer deportivista con más participaciones al máximo nivel es Héctor Hernández.

Tras jugar en Segunda B con el Zaragoza B, el lateral izquierdo debutó en Primera con el primer equipo maño el 10 de febrero de 2013. El vallisoletano disputó los últimos 22 minutos contra la Real Sociedad en La Romareda (1-2).

Más adelante también compitió en la máxima categoría con la Real Sociedad, el Granada y el Alavés, hasta alcanzar los 32 partidos en Primera (24 de inicio), 1.595 minutos y repartir tres asistencias.

El cuarto es Víctor García. El valenciano jugó dos encuentros en Primera con el Real Valladolid durante la campaña 2019-20, cuando militaba en el filial blanquivioleta.

El 7 de julio de 2020, el técnico Sergio González le hizo debutar frente al Valencia en Mestalla (2-1). Disputó 58 minutos y antes de dejar el campo marcó el único gol de los pucelanos.

Nueve días después, Víctor entró desde el banquillo para jugar la última media hora en la derrota con el Eibar en Ipurua (3-1).