Nada más sentarse en la sala de prensa de Riazor, recién nombrado nuevo técnico del Deportivo, Antonio Hidalgo apuntó que este verano sería de mucha actividad. “Me gusta tener una gran cantidad de partidos para que el equipo vaya cogiendo automatismos”. Es entendible la postura del técnico, más teniendo en cuenta la exigencia del objetivo que tiene por delante. Lo que no contó el catalán es que la planificación de su pretemporada de estreno en A Coruña también contaría con un primer tramo sin ningún tipo de ensayo, completamente enfocado a que sus nuevos jugadores asimilaran lo que a su entender son conceptos básicos de su idea de juego.
Después de disfrutar de la jornada de domingo como el primer día libre tras el inicio de la preparación, la plantilla blanquiazul regresa este lunes al trabajo para iniciar la segunda semana de puesta a punto. La agenda es similar a la primera: muchos entrenamientos, ningún partido. Hidalgo ha programado un total de ocho citas durante los próximos seis días, de nuevo el domingo será de descanso, con dos jornadas de doble sesión fijadas para hoy y mañana.
“Todavía van pocos entrenamientos, pero sí hemos trabajado ya salida de balón”, apuntaba Diego Villares el pasado viernes. Parece que el nuevo preparador deportivista prioriza en este arranque de verano dotar al grupo de una base de fundamentos sólidos que poner en práctica cuando arranquen los amistosos. Que los partidos que el Dépor dispute en su trayecto hacia esa primera jornada ante el Granada a mediados de agosto no sean simplemente para acumular minutos en las piernas, sino también para pulir errores desde un primer momento. De esta forma, y salvo cambio de idea durante la semana, posibilidad que el propio club deja abierta en su comunicado, la plantilla se acercará a la veintena de entrenamientos antes de la puesta en escena del próximo miércoles 23 de julio.
Porque de momento, la primera parada del Deportivo no está recogida hasta dentro de 10 días en Santiago. El equipo herculino visitará el Vero Boquete de San Lázaro para medirse a una SD Compostela que trata de configurar un proyecto ambicioso para volver a Segunda RFEF tras el desastroso descenso a Tercera. Allí se reencontrará con el canterano Jorge Valín, que después de varias temporadas regresa a Galicia en busca de reencontrarse con su mejor versión desde el lateral compostelano.
Desde ese punto de partida la preparación dejará ya poco margen para la sorpresa. El Dépor tiene prácticamente todo atado, incluido otro encuentro en tierras gallegas antes de una nueva concentración en el extranjero. El sábado 26 se desplazará a O Couto para enfrentarse al Ourense CF por segundo verano consecutivo, mientras que después llegará el momento cumbre de la preparación. Dos rivales de la segunda división inglesa, Watford y Middlesbrough, para luego regresar a casa y disputar el tradicional Emma Cuervo frente al Oviedo, recién ascendido a Primera, el 6 de agosto.
La única fecha que de momento sigue libre es el último fin de semana antes de que arranque el campeonato de Liga. Espacio reservado a un Teresa Herrera del que falta definir prácticamente todo, desde formato a rivales.
El principal foco de atención en esta segunda semana de preparación será la evolución de los dos jugadores que de momento siguen sin poder entrenarse al cien por cien. El arranque del verano ha sido positivo en el aspecto físico, sin que haya que lamentar ninguna lesión de importancia, pero tanto Arnau Comas como José Ángel continúan recuperándose de sus respectivas operaciones en el hombro y el pubis. Un paso por delante va el central, que ya toca balón, aunque no participa en ejercicios de contacto, mientras que el centrocampista andaluz tiene todavía un importante camino que recorrer antes de estar disponible.
Con el inicio de la pretemporada del filial, cuyo primer entrenamiento está fijado para este jueves, también será interesante ver si Hidalgo tira de algún fabrilista más de los ya citados Brais y Guerrero.