La Primera RFEF, la nueva Segunda B en la que militará el Deportivo la próxima temporada, buscará profesionalizarse y conferir así una nueva cara a esta liga de nueva creación.
Aunque no será hasta el jueves de la semana que viene cuando los clubes pertenecientes a la misma están enclavados a una reunión con la Federación Española, ya se van conociendo detalles sobre su funcionamiento.
Tras vivir el curso pasado una temporada cuyo formato levantó ampollas entre los equipos, aunque fuese atractivo para el espectador, la Primera RFEF discurrirá por unos derroteros más reconocibles. Habrá dos grupos de 20 equipos que se distribuirán por criterio geográfico. Serán 38 jornadas (ida y vuelta).
Asimismo habrá cuatro ascensos (los dos primeros conjuntos de cada grupo subirán de forma directa y las otras dos plazas se decidirán en un playoff, segundo contra quinto y tercero contra cuarto).
Será a partido único, en una sede neutral y habrá prórroga, pero no tanda de penaltis, salvo en el caso de equipos que clasifiquen igual en liga.
La Federación exigirá un aval mínimo de 200.000 euros para poder participara en la Primera RFEF, aunque por otra parte habrá un paquete de ayudas de hasta 50.000 euros en concepto de desplazamientos de los equipos.
Uno de los puntos más importantes se centra en los derechos televisivos, cuyo reparto será fraccionado.
Operadoras como Footters (que ya retransmitió Segunda B el año pasado) o Dazn, quieren hacerse con los mismos.
El reparto, pendiente aún de oficialización, sería de un 50% a partes iguales, un 25% según audiencia (que podría favorecer al Deportivo) y el otro 25% en función de la clasificación en la tabla.
Es uno de los aspectos de la nueva competición de la que están más pendientes los futbolistas.
La idea pasa por profesionalizar la categoría, a través de una negociación entre equipos y el sindicato de los jugadores (AFE) en temas como el salario mínimo.
Habrá hasta 23 licencias, 18 profesionales, y se exigirá ocho sub 23 (hasta ahora solo se pedían seis).
Asimismo, no habrá máximo de jugadores extracomunitarios y será de obligado cumplimiento el contar con un médico colegiado y un delegado federativo.
A partir del curso 2022-23 será obligatorio el césped natural en los campos, gradas de mínimo 4.000 para la 23-24 y mejoras en la iluminación.