Manchester United y Granada pelean por un billete para las semifinales de la Liga Europa en Old Trafford, en un choque al que los ingleses llegan como favoritos por su mayor potencial y con ventaja tras el 0-2 de la ida, y el equipo español sin nada que perder y apelando a la épica para lograr la machada en un duelo que, pase lo que pase, ya es histórico.
La escuadra que dirige Diego Martínez es consciente de la dificultad que supone levantar un resultado tan en contra como el cosechado en la ida y de hacerlo en un escenario tan complicado y ante un rival tan fuerte como el United, pero ha dejado bien claro que no va a Manchester de paseo.
La gran duda que tiene Diego Martínez para el partido es el extremo brasileño Robert Kenedy, uno de sus jugadores más desequilibrantes en ataque que arrastra una lesión en un tobillo del partido de ida tras recibir una entrada por parte del francés Paul Pogba. Si finalmente no puede jugar, Antonio Puertas o el colombiano Luis Suárez entrarían para completar el trío ofensivo en un once inicial en el que parecen tener plaza fija Roberto Soldado y el venezolano Darwin Machís.
Tampoco está clara la apuesta del técnico para el lateral diestro, con Víctor Díaz y el francés Dimitri Foulquier opositando a esa plaza, mientras que el centro de la zaga estará formado por Jesús Vallejo y por Germán Sánchez ante la ausencia del portugués Domingos Duarte.
Pese a la necesidad de marcar un mínimo de dos goles para seguir vivo en la eliminatoria, no se prevé que el Granada modifique su manera de jugar, por lo que se espera un once con su trío habitual de centrocampistas: Ángel Montoro, el francés Maxime Gonalons y el venezolano Yangel Herrera.
