El Deportivo regresó al trabajo en las instalaciones de la Ciudad Deportiva de Abegondo después de dos días de descanso y con cuatro sesiones por delante de trabajo, en otro fin de semana sin partido.
Un entreno en el que dio el susto en el tramo final Lara por una molestia muscular, cuya evolución habrá que ver en las próximas jornadas.
El equipo entrenó con las bajas de Celso Borges, ya lesionado la semana pasada, y la de Héctor Hernández, que ante el Celta B se tuvo que retirar antes por molestias en el muslo derecho. Las pruebas médicas a las que fue sometido el lateral pucelano determinarán el alcance de la dolencia y de tratarse de una rotura muscular podría ser duda para el choque ante el Zamora del próximo domingo 28 de marzo.
En Barreiro su recambio fue Salva Ruiz que cumplió los minutos que estuvo sobre el verde. El lateral valenciano fue titular las primeras trece jornadas, los nueve primeros partidos con Fernando Vázquez y los cinco primeros de la mano de Rubén de la Barrera.
Desde la jornada 14, en el choque que se saldó con victoria ante el Guijuelo no había vuelto a competir (se perdió los encuentros ante Racing de Ferrol y Pontevedra). Si se confirma una lesión muscular de Héctor Hernández, Salva tendría la alternativa de cara al importantísimo compromiso ante los zamoranos en el Abanca Riazor.
Un duelo al que tampoco es seguro que pueda llegar a tiempo Celso Borges, aunque el mediocentro ‘tico’ trabaja para ello. Arrastra desde hace dos semanas una lesión muscular en los isquiotibiales de su pierna izquierda que hizo que fuese baja en el choque ante Pontevedra y Celta B.
La semana pasada ya empezó a tocar balón, pero sigue realizando entrenamiento al margen junto al readaptador Fran Molano. Esta baja se une a la de larga duración de Derik Osede, lesionado ante el Pontevedra. Las pruebas médicas desvelaron una rotura del tendón de Aquiles de su pierna derecha. Una lesión que lo convirtió en baja para lo que queda de campaña.
