El entrenador deportivista Rubén de la Barrera aprovechó el parón de Liga de la presente semana para preparar a conciencia a su equipo, en varios entrenamientos específicos por líneas.
Ayer miércoles el protagonismo recayó en el entramado defensivo de toda la escuadra, incidiendo en tareas como la presión sincronizada, el robo de balón, las coberturas o el repliegue.
Después de haber caído en A Malata el pasado fin de semana por 1-0 ante el Racing de Ferrol —un resultado que hizo menguar las esperanzas de ascenso—, el Depor siente la necesidad de pertrecharse adecuadamente atrás para no encajar más goles y sumar de tres en tres en las tres jornadas restantes de Liga.
En el campo de entrenamiento II de la Ciudad Deportiva de Abegondo el Deportivo realizó un trabajo específico potenciando las tareas de destrucción.
Valladar
En las tres jornadas que restan de Liga el club no puede encajar más
La nota agradable de la jornada en cuanto a futbolistas disponibles se refiere fue protagonizada por el defensa central Derik Osede, que regresó al grupo después de un par de jornadas al margen debido a una serie de molestias físicas que el club no ha especificado.
Aunque por precaución no completó el entrenamiento, sí estuvo a disposición del cuerpo técnico durante el primer sector del ensayo.
Así pues, el único jugador que permanece en dinámica cien por ciento al margen del colectivo es el delantero internacional venezolano Miku Fedor, con una dolencia en el aductor; el ‘7’ estuvo a las órdenes de Fran Molano y de manera paulatina podría reincorporarse al grueso del equipo en las próximas horas en función de sus sensaciones.
Además del citado ensayo por líneas con la retaguardia y el resto del conjunto involucrado en la defensa, el equipo coruñés desarrolló una tarea de posesión y un partido a mitad de campo, en el que ya no tomó parte Derik, dosificado para evitar una posible recaída en sus dolores físicos.
