El Barcelona recibe en el Camp Nou al Ferencvaros húngaro en el estreno del equipo de Ronald Koeman en la Liga de Campeones, que será también una oportunidad para invertir la tendencia negativa del conjunto azulgrana.
Y es que, el nuevo proyecto de Koeman, que arrancó el curso con algunos brotes verdes, cotiza ahora mismo a la baja tras el empate en casa ante el Sevilla y la derrota en Getafe en La Liga.
La visita del Fernencvaros será una nueva prueba para la madurez de este Barça, y su entrenador ya ha advertido que no piensa dejar que la disputa del Clásico contra el Real Madrid el próximo sábado vaya a condicionar este primer duelo europeo.
Aún así, se prevé que el preparador neerlandés haga algunas rotaciones para mantener fresca a la plantilla ante todo lo que viene. A parte del conjunto blanco, los azulgranas se enfretarán, para la semana, a la Juventus de Turín.
El portero Marc André ter Stegen, los defensas Jordi Alba y Samuel Umtiti y el centrocampista Matheus Fernandes siguen siendo baja por lesión. La más sensible es la de Alba, pues el equipo continúa huérfano de lateral izquierdo.
De nuevo, la opción de Sergiño Dest para ocupar este carril a pierna cambiada parece la más probable.
Gerard Piqué y Clement Lenglet volverán a formar el eje de la defensa y, en el doble pivote, Koeman podría mantener a Frenkie de Jong e introducir a Miralem Pjanic como novedad.
Por delante, Philippe Coutinho y Ansu Fati podrían regresar al once en detrimento de Pedri y Dembéle. El tridente ofensivo lo completaría, un partido más, Antoine Griezmann por la derecha, con Leo Messi con libertad por todo el flanco de ataque como falso ‘9’.
Por su parte, el Ferencvaros vuelve a la Liga de Campeones tras 25 años de ausencia y lo hace tras ganar al Kisvárda en la liga de su país.
El ‘Fradi’, como llaman los aficionados al equipo más popular de Hungría, ya considera como éxito su retorno a esta fase de la máxima competición del fútbol europeo. l
