El británico Simon Yates (Mitchelton) dio un golpe de autoridad ganando el pulso a todos los favoritos en la decimocuarta etapa disputada entre Cistierna y Les Praeres de Nava, de 171 kilómetros de recorrido, donde se volvió a enfundar el maillot rojo, tras 4h.19.27.
Un arreón dentro del último kilómetro le permitió despegarse del grupo principal.
Llegó desde atrás, regulando el esfuerzo, arrancó, miró la situación y se marchó camino de la gloria. Alzó los brazos con 2 segundos de adelanto sobre Miguel Ángel “Supermán” López (Astana) y Valverde (Movistar), 5 respecto a Pinot y 7 respecto a Quintana, a quien endosó 17 teniendo en cuenta los 10 de bonificación.
Yates, ‘rojo’ de nuevo
Yates heredó el maillot rojo de Jesús Herrada (Cofidis). “Fue bonito mientras duró”, pero lo cierto es que el español llegó “reventado” a más de 9 minutos. Vuelve así a la cúspide de la jerarquía de la Vuelta, y a ser el favorito número uno. Fue más fuerte que nadie en la montaña de la Sierra de Peñamayor. “No me considero aún favorito. Si mañana me responden las piernas en Lagos de Covadonga estaré feliz, pero las diferencias no son importantes y queda mucha carrera”. Dijo Yates, que se refería a los 20 segundos que tiene de ventaja sobre Valverde y los 25 respecto a Quintana.
Los dos hombres del Movistar no pudieron con Yates en los 4 kilómetros de ascenso a Les Praeres. Supermán López quedó a 47, Urán a 1.28, Izagirre a 1.40 y Mas, séptimo en la etapa, a 1.47.
Seis hombres fugados
En el segundo reto del tríptico asturleonés hubo movimiento desde el principio. Los cinco puertos del menú del día no asustaron a los 6 hombres que salieron en fuga: el asturiano Cortina (Bahrain) se alistó al viaje con Kwiatkowksi (Sky), De Gendt (Lotto-Soudal), Bookwalter y Roche (BMC) y Woods (Education First). El pelotón mantuvo atados a los seis escapados desde el principio y no permitió que la diferencia se disparase más de la cuenta. Nunca paso de los 3 minutos.
En el Alto de la Mozqueta (1ª) el protagonismo lo asumió Nibali imponiendo un ritmo demoledor. No iba por la etapa el ‘Tiburón’, más bien se trataba de un entrenamiento de calidad para el Mundial.
El ensayo arruinó la escapada, de donde cedió en el ascenso Cortina, y estiró el pelotón. Bajando se cayo Woods y Kwiatkowski rompió el grupo llevándose a Roche y Bookwalter. En la Falla de los Lobos (3ª) el Bahrain siguió machacando al personal. Nibali dejó hacer a Izagirre. Herrada ya se estaba despidiendo del maillot rojo. ‘Kwiato’ coronó al frente y se marchó.
El polaco contra el pelotón con la pared de Les Praeres a la vista. A 5,2 de meta fue alcanzado. Bora empezó a marcar el ritmo con otro polaco en escena, Rafal Majka, pero fue el holandés Steven Kruijswijk (LottoNL-Jumbo) el primero en encender la traca. Esperaban 4 kilómetros hasta meta.
Movistar jugó sus bazas con Carapaz y Valverde marcando a Kruijswijk. Quintana apareció a 2,5 de meta con un primer ataque. Se llevó a Supermán. No hubo manera ante el ataque definitivo de Yates dentro del último kilómetro. Ya no miró atrás, trepó a la meta y se anotó su segunda etapa en la Vuelta. l