El Deportivo jugó un papel clave en el regreso del Elche a Primera División ya que fue la llave que le abrió al conjunto ilicitano la posibilidad de disputar el playoff y subir a LaLiga Santander, a la que ha llegado por méritos propios tras acabar sexto la fase regular y superar al Zaragoza en la primera eliminatoria y al Girona, en la segunda.
El conjunto coruñés le dio al Elche el acceso a la promoción de ascenso al imponerse al Fuenlabrada (2-1) en el partido aplazado de la última jornada de Segunda, al que llegó descendido tras no haber podido jugar aquel partido el 20 de julio en horario unificado con el resto de encuentros por los casos de COVID-19 del equipo madrileño.
Un choque que se pretendía aplazar inicialmente para el 30 de julio, después pasó al 5 de agosto y finalmente se jugó el 7 de ese mes y que el Deportivo, en principio, rechazaba jugar al considerar que se habían vulnerado sus derechos y el principio de igualdad de la competición.
Reclutó jugadores
El Deportivo, a pesar de tener a sus jugadores de descanso desde el 21 de julio, logró reclutar a los futbolistas y superó con amplio margen el mínimo de siete profesionales que deben estar en todo momento en el terreno de juego según el reglamento.
En cambio, el Fuenlabrada, que, junto a LaLiga, había solicitado la disputa del encuentro, no pasó de esa cifra en el césped, donde corrió el riesgo de una alineación indebida en el caso de que uno de esos jugadores de la primera plantilla fuera expulsado o se lesionara.
En el tapete del estadio blanquiazul, el equipo madrileño se adelantó en la primera parte y con esa renta llegó al minuto 80 de partido.
Un punto les bastaba para arrebatarle al Elche el playoff de ascenso, pero, en la recta final del choque, a los de José Ramón Sandoval se les escapó ese sueño que tenían en su primera temporada en el fútbol profesional.
Vázquez
“Cumplimos con lo que se le prometió al Elche, ser profesionales”
La remontada
Los coruñeses lograron darle la vuelta al marcador con un doblete del delantero Claudio Beauvue, que había hecho 6.000 kilómetros para presentarse en el partido desde la isla de Guadalupe, en el Mar Caribe (cerca de la República Dominicana), y anotar sus primeros goles como jugador blanquiazul.
El atacante metió el primero de rebote tras un rechazo del portero y anotó el segundo al transformar una pena máxima por una mano del Fuenlabrada que fue pitada a instancias del VAR y que recibió las críticas del entrenador del equipo madrileño.
La opinión del míster
El técnico del Deportivo, Fernando Vázquez, que estaba sancionado y vio el partido desde la grada, afirmó aquel día que había sido un “espectáculo denigrante” que ennegrecía “por completo la competición” y aseguró que “la propia Liga no merecía” que el equipo coruñés disputara el encuentro.
El preparador blanquiazul sintió orgullo de sus futbolistas por haber acudido a la llamada del club y haber “cumplido” lo que se le había prometido al Elche, que iban a ser “profesionales”.
“Lo siento por el Fuenlabrada, que no tengo nada contra ellos. Mis jugadores dieron un ejemplo impresionante. Les di las gracias porque no tenían por qué venir. Sin entrenar, jugaron y, con sus limitaciones, hicieron un partido decente”, explicó entonces el veterano entrenador.
Compromiso indudable
En el césped, habían estado jugadores que acababan contrato, cedidos que tenían que regresar a sus clubes de procedencia, futbolistas, en definitiva, que se arriesgaron a sufrir una lesión que hubiera complicado sus futuros contratos, pero que quisieron jugar y que, indirectamente, abrieron la puerta del ascenso al Elche, que lo consumó posteriormente con un gran playoff de ascenso.
En los partidos decisivos para estar en Primera División., el Elche, sexto en la fase regular, dejó la portería a cero en todos y marcó un tanto en cada uno de los dos encuentros que disputó fuera de casa, los de vuelta, tanto en La Romareda como en Montilivi, donde anotó en el descuento, ese periodo en el que el Deportivo le permitió luchar por ascender. l