ProLiga, la asociación de clubes de fútbol de Segunda B y Tercera División, advirtió del “riesgo” económico que supone para los clubes de fútbol no profesional el Programa ConVivienDo y los cambios en el Protocolo reforzado que llevará a cabo la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
Costes no asumidos
eLa patronal criticó a través de un comunicado oficial el contenido del programa de ayudas ConVIvienDo hecho público este martes tras el acuerdo entre la RFEF y los sindicatos de futbolistas AFE, AJFS y AJFSF que, según recuerda ProLiga, repartirá a los clubes no profesionales de categoría nacional 353.000 test de antígenos.
Sin embargo, recordó que el programa no asumirá la “logística” ni los “costes derivados” de la realización de los análisis así como su comprobación en el laboratorio y cuyos gastos correrán a cargo de los clubes.
“La RFEF también anunció la modificación del Protocolo reforzado donde se establecerá la obligación de realizar test semanales para las competiciones profesionalizadas de Segunda B, Tercera División, Primera Iberdrola, Reto Iberdrola, Primera y Segunda División masculinas y femeninas de fútbol sala y quincenales para el resto de competiciones de ámbito estatal”, añadió.
Falta de información
Al respecto, y “ante la demanda de los clubes asociados”, ProLiga declaró que la RFEF solicitó a los clubes, con septiembre como fecha límite, el presupuesto para la temporada 2020-21 sin informar previamente sobre el importe que éstos iban a percibir en base a los distintos programas de ayudas. Eso, a juicio de ProLiga, “crea problemas” a los propios clubes al no poder hacer el presupuesto con una previsión de ingresos adecuada.
“Una vez conocidos los importes de las ayudas, se concluye que van a ser cantidades inferiores al curso pasado, a pesar de las graves dificultades que van a tener los clubes, debido a la lógica disminución de ingresos propios, los que hayan presupuestado en base a lo percibido en la 2019-20 podrían tener problemas de tesorería y solvencia”.