Hace 85 años, la Avenida de Hércules vio nacer al único Balón de Oro que ha dado el fútbol español. Luis Suárez Miramontes se formó en el Deportivo, pero pronto emigró al Barcelona y posteriormente jugó en el Inter de Milán, clubes en los que demostró ser un futbolista de otro planeta. Hoy vive en Milán, desde donde ha atendido a nuestro diario para hablar del conjunto coruñés y del regreso de la competición futbolística.
Usted vive en una de las zonas de Italia más castigadas por el coronavirus.
Sí, ha golpeado fuerte en toda la zona de Lombardía, especialmente en Milán y Bérgamo. Aquí aún andan con mucha precaución para que no vuelva este bicho porque ha causado un desastre muy grande.
¿Qué tal se encuentra?
Bien, salgo un poquito a la calle a pasear, pero con mucha precaución. Ahora hay que llevar un aparato más cuando se sale, la mascarilla, pero lo importante es poder salir y tener cuidado. Además, mi mujer y yo estamos dentro del grupo de riesgo porque tenemos más de 80 años, así que debemos tener más cuidado aún.
¿Cómo llevó los tres meses sin fútbol hasta el regreso de la competición?
Como todo el mundo, esperando que volviera, porque si volvía, aunque lo haya hecho de una cierta manera, era señal de que el virus estaba más controlado. Ahora ha empezado sin público y con menos contacto y digamos que los partidos son un poquito raros. A los equipos les falta algo de agresividad, el ritmo es muy bajo, parece que los futbolistas tienen miedo de hacer alguna entrada un pco exagerada, y se están dando y se van a dar resultados un poco raros. En este periodo creo que se van a ver más resultados fuera de la lógica que antes. Pero es normal porque han sido más de tres meses de parón y los jugadores pueden acusar pasar de tanto tiempo de inactividad a tener partidos cada tres días. Hay equipos a los que puede pasarles mucha factura, sobre todo a los que tengan plantillas más cortas y eso puede influir en el resultado final de la competición.
Los grandes saldrán aún más favorecidos, ya que tienen más fondo de armario.
Sí, ellos tienen mejores jugadores y plantillas más grandes y completas, así que si tienen necesidad de echar mano de algún chaval de la cantera, pueden recurrir a ellos porque tienen mejores canteras.
¿Qué le ha parecido el regreso de la Liga española en esta primera semana?
Bien, ha habido alguna sorpresa. Los partidos que he visto me han parecido un poco blandengues, con poco ritmo y el cambio de la parada para la hidratación. Hay que esperar un poco de tiempo a ver qué tal.
¿Cómo ha visto al Deportivo?
Vi el partido contra el Sporting y me ofreció muchas dudas. No hay grandes cosas, sus jugadores no son muy buenos, así que se va a sufrir. A ver si se salvan y el proximo año preparan un equipo mejor, porque la gente de A Coruña está acostumbrada a tener un equipo mejor, practicar buen fútbol y disfrutar.
¿Le gusta Fernando Vázquez?
Reactivó al equipo cuando llegó, pero el entrenador puede motivar y corregir cosas relativamente porque después son los jugadores los que marcan las diferencias. Como dicen los argentinos, los jugadores son los que están en la cancha, así que si no hay buenos jugadores, por mucho que invente el técnico, poco se puede rascar.
Entre lo apretado que está el calendario y la necesidad de puntos, al Depor le esperan unas semanas muy intensas.
Hay que jugárselo todo, ahí sí que no te tienes que equivocar con ninguno. Esperemos que el Depor aproveche los partidos porque si no, te metes en Segunda B, que es una categoría que es un desastre para equipos histróricos como el Deportivo porque la gente empieza a desilusionarse. Hay que sufrir y esperemos que sirva para lograr la permanencia.
¿Le ha convencido el Barcelona en sus dos primeros partidos, tras el parón?
Ha empezado bien, sacando resultados. Ahora tiene un partido muy duro, el de Sevilla, pero tiene un buen equipo, poco a poco irá mejorando la condición y creo que se presentará en la Champions en buenas condiciones.
Aunque no se ve ese buen juego de hace algunos años.
Sí, porque ha ido cambiando jugadores y entrenadores y, claro, antes tenía un centro del campo con Xavi, Iniesta, Busquets... que, además, se asociaban con Messi y eso son palabras mayores. No es fácil sustituir ese tipo de jugador, no se encuentran peritas en dulce todos los días, aunque tengas dinero. Si pierdes ese tipo de jugadores, la esencia la vas perdiendo porque los mimbres no son los mismos, pero se puede seguir haciendo buen fútbol, pese a todo.
¿Qué le parece la decisión de resolver la Champions con una final a 8 en Portugal?
Va a ser una novedad que puede influir porque juegas en un país neutral a partido único, que si te equivocas, te vas para casa. No hay opción de fallo, como en el doble partido, que puedes corregir algún error en la vuelta. Hay que ver cómo llegan. Puede haber muchas sorpresas.
