Al RC Deportivo le han salido arrugas en partidos importantes frente a equipos con menor media de edad y experiencia, como el del pasado curso ante el Extremadura en la recta final de curso y el pasado domingo contra el filial del Celta.
En ambas ocasiones los pupilos de Fernando Vázquez no fueron capaces de imponer el oficio que se les presupone y temblaron mucho más ante la responsabilidad ante escuadras que sobre el papel no estaban tan rodadas en la élite.
Muchos expertos futbolísticos coinciden en apuntar a que el descenso a Segunda B experimentado el pasado ejercicio 19-20 por el Depor quedó certificado el 12 de julio, fecha en la que el equipo recibía a un desahuciado Extremadura.
Los de Almendralejo, entrenados por Manuel Mosquera, aterrizaban en A Coruña con una convocatoria de circunstancias en la que sobresalían los jugadores del filial.
No en vano, hasta seis jugadores no pertenecientes a la primera plantilla de los de Almendralejo tuvieron minutos en Riazor (tres en el once inicial, siendo el portero uno de ellos).
La media de edad de los extremeños en esta contienda fue de 24,8 años, muy inferior a los 27 exactos del once inicial deportivista, donde figuraban hombres mucho más hechos a la competición profesional como Dani Giménez (36 años), Bóveda (31) o Álex Bergantiños (34).
Aunque el cuadro coruñés no pudo comenzar el choque de la mejor manera, gracias a un tanto tempranero de cabeza de David Simón, de forma inexplicable el equipo fue perdiendo fuelle y dejándose apoderar por la ansiedad hasta que los azulgrana remontaron y consiguieron un 2-3 que dejó tambaleándose en la clasificación.
Apenas cinco meses después el Depor volvió a paladear la hiel de la decepción contra un conjunto en proceso de crecimiento como el Celta B, un filial repleto de futbolistas de talento en formación.
En este caso, la diferencia de edad es incluso más marcada que en el duelo de la Segunda División del pasado ejercicio; no en vano, el conjunto vigués posee una media de edad de solo 21, 8 años, mientras que la deportivista ascendió a 27,7.
Ningún titular en la formación celeste superaba los 25 años, con valores como Carlos Domínguez que no llegan a la veintena.
Al igual que ante el Extremadura, la frescura y espontaneidad del Celta B hizo mella en un Deportivo mucho más curtido, que sin embargo no fue capaz de vulnerar a un filial en una segunda parte con el marcador en contra y donde los herculinos se agarrotaron por completo.