Las férreas medidas de control financiero que el presidente de LaLiga, Javier Tebas, se jactaba de haber impuesto y obligado a cumplir, bajo la amenaza de descensos que acabaron sufriendo equipos en el pasado más reciente, son las mismas que regatea con maestría el Fuenlabrada.
El equipo del que es asesor jurídico el hijo del dirigente de la patronal recibió esta semana una notificación de la Seguridad Social donde se embarga al club los créditos y los derechos a su favor a razón de 73.202,19 euros por este mes de septiembre, según adelantó el periodista Paco Rabadán, de OK Diario.
Según ha constatado este diario, la deuda del club madrileño con la Seguridad Social es superior a los 300.000 euros y la que ha contraído con el ‘fisco’ es de más de 600.000 euros.
Este preocupante anuncio ha llegado también a los patrocinadores del club y al Ayuntamiento, con el que el 25 de junio de 2019 la entidad firmó un acuerdo de concesión del Fernando Torres, su estadio, durante 25 años.
Un campo que el Fuenlabrada consiguió volver a tasar por un valor superior al doble de la primera tasación, gracias a la intermediación de dos arquitectos cántabros recomendados por el presidente de LaLiga, Javier Tebas.
Activo en el mercado
Unos números muy preocupantes para un equipo que sumará su segundo curso en Segunda, a la que llegó con sus cuentas mal presentadas (en enero las modificó, tras una primera auditoría, con salvedades, presentada por Gálvez Auditores).
Unos gestores despedidos justo cuando estalló el escándalo de positivos en A Coruña. No obstante, todo esto contrasta con la frenética actividad que está desarrollando el club en el mercado estival, siendo de los más activos en Segunda e incluso superando a conjuntos de primera en el número de operaciones.
Poco rigor
Ante la supuesta bandera enarbolada por el presidente del férreo control financiero muchos clubes, en privado, por miedo a represalias, aseguran que la realidad es que se hace y deshace según el antojo de Tebas. Lo ocurrido con el Fuenlabrada tanto ahora, como el curso pasado, evidencia esa distinta vara de medir que están asumiendo el resto de clubes.
La campaña pasada, con los problemas en las cuentas el Fuenlabrada no tuvo que dar ninguna explicación a LaLiga sobre el estado de las mismas. Sus problemas con la Seguridad Social y Hacienda se quedarán seguramente en una anécdota. Un caso similar a la parsimonia con la que la patronal se toma el ‘caso Málaga’ con un ERE previsto, falta de jugadores y LaLiga mirando hacia otro lado y haciendo la “vista gorda”.
