El Barça sigue en alza y ayer se impuso por 75-87 en la pista del colista de la Euroliga, el Khimki de Moscú, en un choque en el que la buena defensa azulgrana y su dominio del rebote (40 capturas, 15 ofensivas) ha sido una de las claves, junto a la gran actuación del base Nick Calathes.
La estrella del equipo ruso Alexey Shved, muy solo (23 puntos), no pudo contrarrestar el juego de Cory Higgins y Kyle Kuric, 18 puntos cada uno, junto a Rolands Smits (12 y 8 rebotes) y Pierre Oriola (9 y 10) con un Calathes magistral que ha batido su propio récord de asistencias, con 15.
Por su parte, el Baskonia desperdició otra oportunidad para acercarse a los ocho primeros, después de caer frente al Fenerbahce (96-76).
También perdió el Valencia Basket, en Milán ante el Olimpia (95-80), y abandona los puestos de playoffs.
Hoy es el turno del Real Madrid, que arranca con el duelo de Euroliga contra el Estrella Roja serbio (21.00 horas), otra semana maratoniana con tres partidos en cinco días.
La visita del equipo balcánico será el prólogo de una nueva semana apretada para los pupilos de Pablo Laso, que el viernes visitarán al Bayern Munich alemán y el domingo al Obradoiro, este último duelo pendiente de los casos de Covid-19 del equipo gallego, en un ritmo similar al trío de partidos con el que acabarán el mes (Panathinaikos, Alba Berlín y Gran Canaria).
Multa
Por otro lado, la Euroliga anunció que sanciona al Baskonia con una multa de 8.000 euros por protestas contra el trío arbitral durante el encuentro ante el CSKA Moscú correspondiente a la decimoctava jornada de la competición.
Concretamente los castigos recaen sobre el director deportivo del club, Félix Fernández, y su presidente, Josean Querejeta, que han sido sancionados con multas de 4.500 y 3.500, respectivamente, “por acciones que representan una falta de respeto” al trío arbitral.
La sanción se basa en el artículo 27.2.b del código disciplinario de la Euroliga, que indica que “será considerada como una infracción menor insultar, ofender o cometer actos que demuestren una falta de respeto hacia un miembro del equipo arbitral, otro individuo, el público, un seguidor o cualquier persona en general cuando tales acciones no constituyan una infracción grave”.
El club vitoriano ha confirmado que ha llevado a cabo las alegaciones pertinentes y que espera la respuesta a las mismas próximamente.
