España ratifica su condición de potencia mundial en piragüismo
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España ratifica su condición de potencia mundial en piragüismo

España ratifica su condición de potencia mundial en piragüismo
Los palistas Bárbara Pardo e Íñigo Peña se adjudican el bronce en el K2-500 metros mixto del Mundial de Duisburgo

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 La selección española de piragüismo esprint ha corroborado en la localidad alemana de Duisburgo su condición de gran potencia universal al sumar trece medallas en los Mundiales 2023 y hacer prácticamente pleno de embarcaciones clasificadas para los Juegos de París.


La ‘armada’ concluyó en la segunda plaza del medallero con tres oros, cinco platas y cinco bronces, tan solo superada por los anfitriones, que acumularon tres victorias, cinco segundos puestos y seis terceros para catorce preseas en total. Canadá acabó tercera con un balance de 3-2-2.


En los pasados Mundiales, disputados en Halifax (Canadá), España terminó el cabeza del medallero con cuatro oros, dos platas y dos bronces.


En la última jornada, este domingo, Estefanía Fernández consiguió el tercer oro de la delegación española al imponerse en la prueba K1 5.000. La piragüista extremeña se impuso con un tiempo de 22.45.357 en un final apretadísimo en el que aventajó a la canadiense Madeline Schmidt, plata, en poco más de un segundo.


Las dos otras medallas de oro las consiguieron en jornadas precedentes Pedro Vázquez e Íñigo Peña en K2 1.000 metros, y el C4 500 de Joan Moreno, Pablo Graña, Manuel Fontán y Adrián Sieiro.


En K1 5.000 el talaverano Paco Cubelos, octavo con un tiempo de 21:14.450, se quedó lejos del podio que ocuparon el danés Mads Brandt Pedersen, el portugués Fernando Pimenta y el alemán Nico Paufler.


En C1 5.000 la gallega Cristina Soutelo, que ocupó la plaza de María Corbera, se clasificó en décimo lugar. La canadiense Katie Vincent fue la ganadora con 25.57. La plata fue para la Zsofia Kisban y el bronce para la china Li Li.


El madrileño Noel Domínguez entró noveno en la final de C1 5.000 con 23.36. El ganador, el húngaro Balazs Adolf, recorrió la distancia en 22.12.97, mientras que subcampeón fue el alemán Sebastian Brendl, a seis segundos, y bronce el polaco Wiktor Glazunow.


Antes de que las finales de 5.000 metros pusieran el punto final a los Mundiales, España sumó en la matinal del domingo una plata y tres bronces.


María Corbera logró su tercera medalla de estos mundiales al proclamarse subcampeona en C1 500, una prueba dominada por la canadiense Katie Vincent (2:01.545). Corbera, que también fue plata en C2 200 y C2 500, entró en 2:02.860 y la chilena María Mailliard completó el podio con 2:03.218.


Adrián del Río y Rodrigo Germade se hicieron con el bronce en el K2 500, una prueba muy igualada en la que finalmente se impuso Portugal (1:29.037), por delante de Hungría (1:29.184). Los españoles llegaron en 1:29.389 tras pasar primeros por los 250 metros.


Otro bronce ganaron Tano García y Pablo Martínez en el C2 500. Alemania y China entraron por delante, con 1:36.972 y 1:38.126, por 1:38.571 de los sevillanos, que defendían el oro ganado en 2022.


También fue tercero el bote mixto K2 500 de Bárbara Pardo e Íñigo Peña (1:33.912), tras Alemania (1:33.033) y Australia (1:33.179).


Se quedaron sin medalla el C4 500 de María Moreno, Claudia Couto, Valeria Oliveira y Antía Otero, quintas y lejos del ritmo que impuso China, y el K2 500 de Laia Pelachs y Begoña Lazkano, séptimas en una regata ganada por Dinamarca, lo que de momento no les permite sacar el billete olímpico.

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