Todavía es pronto para soñar, sin embargo, dos buenos partidos y, por fin, una victoria a domicilio provocan una necesaria ilusión en el deportivismo. Por lo visto hasta ahora se nota un cambio de juego en el campo, una mayor intensidad y como se van acoplando los nuevos fichajes recién llegados a la disciplina blanquiazul.
Después de los traumáticos cambios sufridos desde el final de la temporada pasada en la estructura del Club, parece que se ha dado con un staff técnico que ha sabido interpretar las necesidades del Dépor. Fueron muchas las sospechas que engendraba la llegada del nuevo director deportivo, Fernando Soriano, y de Idiákez en el banquillo. Los resultados, el juego y la convicción del equipo hasta ahora avalan esta decisión.
Los jugadores que han llegado para reforzar la plantilla también confirman esta reactivación. Las incorporaciones en defensa, pese a su edad, aportan veteranía y experiencia. Si les respeta las lesiones y el estado físico les dan para completar la temporada, los laterales Paris Adot, Balenziaga y Ximo Navarro demostrarán que tiene muchos kilómetros en esto del fútbol. Acertada parece la llegada de Pablo Vázquez para hacer pareja con el otro Pablo en el centro de la zaga.
El medio centro, la línea que ha sufrido bajas más sensibles (Bergantiños, Soriano, Rubén Díaz, Isi Gómez, Olabe) se ha reforzado con nuevas llegadas. Si José Ángel Jurado está llamado a ser el dueño de la medular y liberar a Villares para que avance su posición en el campo, el bregado centrocampista Salva Sevilla -pese a los malos recuerdos que generó en su día entre la afición coruñesa- estoy seguro que va a darle una mayor solidez al conjunto. Completan la medular la vuelta del jugador criado en la cantera deportivista, Hugo Rama, y el prometedor media punta Pablo Muñoz procedente del Rayo Vallecano y por quien el Dépor ha hecho el mayor desembolso económico del curso.
La marcha de Quiles dejaba solo a Lucas Pérez liderando el ataque coruñés. Para darle cobertura al jugador franquicia del Dépor aterrizaron en Riazor Barbero, Cayarga, Davo, y Vacarce. La mejor noticia en la vanguardia es que dos canteranos han tomado la alternativa con éxito. Yeremay y Mella ya han levantado del asiento a más de uno aficionado blanquiazul. Son buenos, rápidos y descarados a la hora de encarar al rival. Desgraciadamente el canario va a estar un par de meses de baja. Esperamos un rápida y feliz recuperación de una de las grandes alegrías de la temporada.
Se cierre plantel con la adquisición de Germán Parreño, portero que llega desde el Ibiza, y que de momento le ha arrebatado el puesto a Mackay.
La competición es larga y seguro que llegarán malas rachas que generarán dudas, pero hay buenos mimbres, parece que bien dirigidos y que empiezan ilusionando a la grada.
@pgarcia_ramos